Planes nuevos para el viejo continente La conciencia en Europa de que no queda más salida que incrementar los esfuerzos militares conjuntos se evidencia en las palabras del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, afirmando que este 2022 será “el año de la defensa europea”, según afirmó en el marco del encuentro con los 27 jefes de Estado y de Gobierno de la UE del pasado noviembre.
Tiene un presupuesto de 19,5 millones de euros, el mayor de los 26 proyectos seleccionados en el Edidp en su convocatoria 2020.El acto fue organizado por ETME, el astillero griego coordinador de un consorcio formado por 15 empresas europeas, y contó con la presencia virtual del representante de la Comisión Europea para los fondos Edidp del sector naval, Francisco Casalduero, y representantes de los ministerios de defensa implicados. Durante la reunión, los participantes en el consorcio expusieron las capacidades de sus empresas y se describieron las principales actividades para el diseño de una red de plataformas semiflotantes no tripuladas equipadas con sensores y vehículos no tripulados de última generación que será capaz de operar con total autonomía para ser desplegada en cualquier zona marítima para realizar tareas de vigilancia marítima.Participación de NavantiaNavantia expuso las actividades que desarrollará en el proyecto, centradas en las áreas de sistemas de mando y control, de control de plataforma, sistemas de armas ligeros, vehículos no tripulados, planta eléctrica y soporte técnico.
El momento tuvo lugar la semana pasada en un acto que contó con representantes de los nueve Estados miembros implicados y de las empresas, entre las que se encuentran las firmas españolas Escribano Mechanical & Engineering, Indra Sistemas y Piedrafita Sport. Las demás participantes del consorcio son las francesas Arquus y Nexter Systems; la belga CMI Defence, la estonia Cybernetica, las alemanas Diehl Defence, DST Defence Service Tracks, FFG Flensburger Fahrzeugbau Gesellschaft y Krauss-Maffei Wegmann; las también finlandesas FY-Composites; Millog; Savox Communications y Spinverse; la griega ISD Lyseis Olokriromenon Systimatonanonymos Etaireia; la letona LatvijasMobilais Telefons y la danesa Tencate Advanced Armour Danmark. El programa Famous tiene como objetivo desarrollar tecnologías y actuaciones futuras que mejoren las capacidades de combate terrestre en las áreas de movilidad, operación híbrida, generación de energía y almacenamiento de energía, así como sistemas de seguridad, conciencia situacional, robótica, soluciones C4I (siglas en inglés de mando, control, comunicaciones, informática e inteligencia), sistemas de armas y soluciones modernas de apoyo al ciclo de vida. “Enfoque único e innovador” En palabras de presidente de la Unidad de Negocios Terrestres de Patria, Jussi Järvinen, “este consorcio Famous es un enfoque único e innovador para desarrollar áreas de tecnología de próxima generación que se pueden utilizar en una variedad de vehículos y sistemas blindados, eventualmente en uso real”. El programa Edidp, en el que se enmarca este proyecto, está diseñado para apoyar la competitividad y la capacidad de innovación de la industria de defensa de la UE, en la perspectiva de los próximos pasos en el contexto del Fondo Europeo de Defensa (FED).
La versión local del modelo europeo NH90, desarrollado por un consorcio liderado por Airbus, no ha ofrecido el grado de disponibilidad esperado, por lo que el ministro de Defensa del país, Peter Dutton, ha anunciado su sustitución, tanto en la Armada como en el Ejército, por un nuevo modelo.
Los Estados miembros realizaron solo el 11% de su adquisición total de equipos en cooperación con otros, de acuerdo con el informe anual sobre gastos en defensa presentado por la EDA La entrada en vigor este año por primera vez del Fondo Europeo de Defensa, que equivale a un primer presupuesto militar conjunto, junto a los llamados proyectos Pesco (acrónimo en inglés de evaluación anual coordinada sobre defensa) o CARD (siglas en inglés de revisión anual coordinada de defensa), aún no se han dejado sentir suficientemente en la cooperación europea en materia de defensa.
“Como principales actores industriales europeos en el sector de la defensa naval, se cree que es el momento adecuado para iniciar una colaboración real, concreta y de valor añadido en torno a un programa común que será la primera capacidad naval común en Europa”, apuntan. Los tres astilleros también aseguran que mediante “un marco unificado de normas y utilizando metodologías colaborativas de ingeniería avanzada en colaboración, el EPC se desarrollará desde los estudios conceptuales hasta el diseño inicial”.
En estas operaciones, los retornos exigidos por el cliente están en el entorno del 50% y con frecuencia se exige en los pliegos la integración por empresas locales, lo que condiciona la participación de la cadena de valor española.En tercer lugar, podemos considerar las exportaciones directas, donde entran un amplio conjunto de tipologías.
Y cuando se habla de dotar a Europa de capacidades militares nos encontramos con unos Estados renuentes para dotarse de medios especialmente avanzados, al menos, comparables a los que poseen los EE.UU., algo que ellos reprochan constantemente a Europa en las cumbres de la OTAN. Si bien es cierto que el Plan de Acción Europeo de Capacidades y el Fondo Europeo de Defensa constituyen pasos significativos en la obtención de una mayor autonomía, las cantidades invertidas en I+D de los europeos están muy por debajo, en torno a la séptima parte, de lo que invierten los norteamericanos, lo que sugiere que la brecha en capacidades continúa creciendo.
Entre estas iniciativas de desarrollo militar destaca en el ámbito naval el denominado 4E, diseñado para equipar con las tecnologías más avanzadas a los futuros buques que sustituirán a las actuales fragatas y destructores de las marinas europeas, y que está coordinado por España. Además, el país participa en el proyecto de ámbito aéreo de una nueva generación de pequeños sistemas aéreos remotamente tripulados (RPAS), denominado NGSR; en el destinado al Modelado Automatizado, Identificación y Evaluación de Daños de Terreno Urbano (conocido por las siglas Amida-UT), y que está agrupado en el apartado de proyectos del entorno ciber y de sistemas C4ISR (mando, control, comunicaciones, computación, inteligencia, vigilancia y reconocimiento) de la Pesco, y en el desarrollo del dominio espacial CoHGI (siglas de Centro Común para Imágenes Gubernamentales) De las cuatro, destaca la 4E (siglas, tanto en castellano como en inglés, de Elementos Esenciales de los Escoltas Europeos).
Tierra Los nuevos proyectos Pesco en el ámbito terrestre consisten en la creación de un centro de ensayo y simulación para carros de combate (MBT-Simtec), en el que están implicadas Francia, Bélgica y Chipre; y una iniciativa de mejora de la capacidad europea para implicarse y apoyarse en sus fuerzas armadas, denominada EU Mil Part, por las siglas en inglés de Asociación Militar de la UE, en la que participan Francia, Estonia, Italia y Austria.
El propósito del proyecto, en palabras que el propio Borrell ha plasmado en el documento, es conseguir “actuar con mayor rapidez y decisión ante las crisis; proteger a nuestros ciudadanos contra las amenazas que cambian rápidamente; invertir en las capacidades y tecnologías que necesitamos, y asociaciones con terceros para lograr objetivos comunes”.
La nueva “capacidad para la acción autónoma”, que “debe estar respaldada por la capacidad y la voluntad de poder decidir a nivel político”, y que tiene que estar sustentada sobre “una base industrial de defensa consolidada en la UE”.
Murtra puso el foco en la puesta en marcha del Fondo Europeo de Defensa, que a su juicio aporta estabilidad en las inversiones, factor necesario para dicho sector, y la apuesta europea por una mayor convergencia entre países, que permitirá competir en mejores condiciones a nivel global y favorecerá la interoperabilidad de los sistemas en la región.