Quatripole defiende que su vehículo aerolanzable cumple los requerimientos técnicos marcados por el Ejército

La empresa española Quatripole ha defendido que su vehículo aerolanzable cumple los requerimientos técnicos marcados por el Ejército de Tierra en el Pliego de Prescripciones Técnicas de la licitación adjudicada hace unos días a la empresa Einsa.

En un comunicado emitido por la compañía, señala que los incumplimientos técnicos que se indican en el Acta de Resolución sobre el vehículo ‘muestra’ entregado por Quatripole “no responden a la realidad”.

Explica que, respecto a los incumplimientos referidos a la retención del freno de servicio y las dimensiones de las baterías, “además de cumplir el vehículo dichos requerimientos de acuerdo al PPT, no están incluidos en el Plan de Pruebas del expediente, por lo que, consecuentemente, no tienen valoración alguna”. Además, añade que el equipo evaluador no comunicó a la empresa de forma oficial ninguna anomalía ni incumplimiento de dichos requisitos.

En cuanto a los otros dos requerimientos -pérdida de combustible y líquido de la dirección asistida y tiempo de montaje de la barra antivuelco-, la compañía entiende que “no son esenciales”, sino que son “anomalías menores y habituales en los procesos de pruebas de vehículos cuyas soluciones son inmediatas y sencillas”.

En este caso, la empresa también incide en que el equipo evaluador del expediente no comunicó a Quatripole ninguna avería ni incidencia esencial “ni se utilizó el tiempo de revisión de 24 horas por estas razones, como es preceptivo e indica el PPT y el propio Plan de Pruebas”.

La compañía concluye la nota remarcando la idoneidad de su vehículo, modelo Q-150 D, de diseño específico militar, robusto y preparado para uso de los Ejércitos en condiciones severas de trabajo. Destaca que está en servicio en el Ejército español y ha sido probado por otros Ejércitos, y añade que es aerotransportable y aerolanzable, habiendo superado las pruebas de lanzamiento durante la evaluación técnica en la operación de seco y desde el avión Hércules C-130.