La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha sugerido al Ejército de Tierra una serie de mejoras en sus próximas licitaciones de los contratos de obras, catering y vestuario para hacerlas lo más competitivas posible.
El órgano recomienda estudios de mercado previos, dividir los contratos en lotes e incluir cláusulas para garantizar que los licitadores conocen la normativa de competencia y las consecuencias de su incumplimiento. El Ejército de Tierra utilizará el acuerdo marco en dos casos: los contratos de obras y de catering. Se trata de un instrumento que preestablece varias condiciones o términos comunes a todos los contratos que se adjudiquen durante su vigencia.
El acuerdo marco de obras centraliza, por primera vez, la selección de los constructores que realizarán las obras de primer establecimiento, rehabilitación y reparación en los inmuebles del Ejército de Tierra en España durante un año. En el caso del acuerdo marco de catering incluye los servicios de restauración y suministro de comidas en diversas bases, acuartelamientos y establecimientos, así como en los actos que se celebren en esas instalaciones durante dos años.
El contrato de vestuario englobará en un único lote la fabricación y distribución de 91 prendas para todo el personal del Ejército de Tierra durante tres años.
Nueve recomendaciones
La CNMC propone hasta nueve recomendaciones para maximizar la eficiencia del gasto público. Competencia plantea "realizar un estudio de mercado previo y riguroso y analizar tanto la estructura de la oferta como las necesidades de la demanda antes de diseñar el pliego", además de valorar el uso de sistemas dinámicos de adquisición, "una opción menos restrictiva que los acuerdos marco porque éstos últimos cierran el mercado durante su vigencia".
También sugiere ofrecer información clara. "Los pliegos deben definir claramente su objeto y utilizar de forma correcta los códigos identificativos de las prestaciones, y se debe evitar que los potenciales interesados desistan de participar en la licitación por no contar con la información adecuada", destaca.
Entre las propuestas también están: dividir los contratos de vestuario y catering en lotes para mejorar los resultados de convocatorias anteriores; tener especial cautela -desde la óptica de defensa de la competencia- si se utiliza la figura de las uniones temporales de empresas (UTE); ponderar los criterios de adjudicación, "los requisitos deben ser objetivos y no estar relacionados con la territorialidad"; no limitar los adjudicatarios de los acuerdos marco porque "restringe de forma innecesaria la concurrencia y las posibles eficiencias"; e incluir cláusulas que garanticen que los licitadores conocen la normativa de competencia y las consecuencias de incumplirla.
Por último, la CNMC recomienda "valorar la proporcionalidad de los requisitos de solvencia para que se ajusten los umbrales de entrada de forma proporcional a las dimensiones de cada lote —considerando especialmente el perfil de los potenciales licitadores (en su mayoría, pymes) y la experiencia del Ejército en contratos similares—".