Dos aviones de la misión humanitaria brasileña en el Libano, un KC-390 y un E-JET 190 (VC-2), ambos fabricados en Brasil por Embraer, despegaron de Guarulhos (SP) rumbo a Beirut el día 12, donde llegaron sanos y salvos a la mañana siguiente.
El gobierno brasileño envió seis toneladas de suministros sanitarios y alimentos al Líbano después de la explosión masiva que destruyó el puerto de Beirut.
La operación es coordinada por los ministerios de Defensa, Relaciones Exteriores y Salud, cumpliendo con la determinación de la Presidencia de la República.
El séquito de las autoridades incorporadas en VC-2 está encabezado por el ex presidente Michel Temer, hijo de libaneses. Para este viaje, Temer tuvo que obtener una autorización de viaje internacional con el Tribunal Federal brasileño.
El presidente de la República, Jair Bolsonaro,destacó la importancia de la misión humanitaria brasileña. "Lo que podemos ofrecer, proveniente de gran parte de la comunidad libanesa, es del corazón. Este acontecimiento marca aún más nuestro acercamiento con el Líbano. Nuestros países no renuncian a la democracia y a la libertad. Donde un ser humano necesita ayuda, haremos lo que podamos", dijo.
El embajador del Líbano en Brasil, Joseph Sayah, elogió el gesto del gobierno brasileño. "Me gustaría expresar mi sincero agradecimiento. Agradecemos su apoyo y ayuda. Somos países hermanos en lados opuestos del mundo. Pueden estar seguros de que el Líbano nunca olvidará la generosidad de este gran país que alberga a millones de libaneses", expresó.
El gobierno brasileño, a través del Ministerio de Salud, y la comunidad libanesa han donado medicamentos y suministros básicos de salud, como antibióticos, corticoesteroides, analgésicos, vendas, jeringas y catéteres.
También se enviarán a ese país unas 100.000 máscaras quirúrgicas, 300 respiradores pulmonares y alimentos.
Para Embraer, fabricante de aeronaves empleadas en la misión humanitaria, el retorno institucional de la misión es muy importante, y esto explica por qué el par de aviones hizo tres paradas antes de llegar a Beirut, incluyendo España.
Cada aterrizaje y despegue es registrado y reportado por la prensa, y mientras los aviones permanecen en el suelo, es otra oportunidad para la empresa brasileña para promover sus productos y capacidades.
El VC-2 ya tiene experiencia reciente en vuelos humanitarios, habiendo sido empleado en la misión que re repatriaba con éxito a brasileños que se encontraban en Wuhan, China, al comienzo de la pandemia Covid-19.
En cuanto al KC-390, el Millennium, debuta en una verdadera misión de transporte internacional presentando rendimiento y disponibilidad que confirman la excelencia del proyecto y el éxito de Embraer en la elección de las capacidades que el avión ofrece.
Imágenes: Força Aérea Brasileira