ITP Aero ganó 69 millones en 2018, un 9,2 por ciento menos

La compañía ITP Aero obtuvo el año pasado un beneficio neto después de impuestos de 69 millones de euros, un 9,2 por ciento menos que en el ejercicio 2017. El descenso de los ingresos es resultado de los ajustes contables y de las modificaciones derivadas de la nueva ley que regula el Impuesto de Sociedades en Bizkaia, según explicó la empresa vasca en la presentación de los resultados este jueves.

Otros indicadores presentaron un mejor comportamiento. La facturación del fabricante de motores y turbinas ascendió a los 880 millones de euros, un 6% más que el año anterior, mientras que el EBIT aumentó un 4% hasta los 79 millones de euros, debido a los buenos resultados del mercado civil.

Por áreas de negocio, Civil alcanzó el 67% de las ventas, Defensa el 18% y Soporte en Servicio el 15%. "El crecimiento se ha registrado a pesar de los problemas en servicio del motor Trent 1000 y del coste derivado de la participación de ITP Aero como socio a riesgo y beneficio del programa", resaltó la firma.

Defensa y FCAS

En Defensa, ITP Aero explicó que continúa con sus principales programas TP400, EJ200 y MTR390-E. En 2018, los ingresos bajaron ligeramente en relación a 2017 debido a la entrega del último motor EJ200 de Eurofighter para el Ejército del Aire español y al descenso en líneas generales de la producción de este motor para los países involucrados en el caza de combate europeo. En este sector, la empresa anunció que aspira a estar presente en el futuro sistema de combate aéreo europeo en el que trabajan ya Dassault y Airbus, un programa al que España acaba de adherirse.

El director general, Carlos Alzola, afirmó que de cara al próximo año "la exposición de ITP Aero al mercado de aviación civil respalda nuestra expectativa de un crecimiento esperado de en torno al 10% en facturación en 2019, con un margen operativo estable. En el mercado de Defensa, esperamos dar soporte a la participación de España en el FCAS".

Plan industrial

ITP Aero destacó además los avances significativos en su plan industrial incluido en el Plan Estratégico ITP 2020, con una inversión de 14 millones de euros (2018-2021) en su nueva instalación de Derio, a lo que hay que sumar la nueva planta de fundidos de Sestao que ya se encuentra totalmente operativa.

En el apartado de investigación, subrayó el desarrollo de la tecnología para la turbina de presión intermedia del motor UltraFan de Rolls-Royce y los proyectos en marcha en el CFAA (Centro de Fabricación Avanzada Aeronáutica), con un gran número de programas en desarrollo. En cuanto al personal, la empresa incrementó su plantilla en un 5% hasta alcanzar los 3.812 empleados a diciembre 2018, la mayoría de las nuevas incorporaciones se produjeron en las plantas de Zamudio y Querétaro (México).

Sobre los resultados, Alzola apuntó que "en nuestro primer año como entidad corporativa dentro del Grupo Rolls-Royce, hemos registrado un buen rendimiento operativo, un servicio excepcional a nuestros clientes y unos ingresos y rentabilidad sólidos. Además, hemos seguido apostando por el futuro de la empresa mediante inversiones en I+D, nuevos programas, presencia industrial y liderazgo.”