La española Indra tiene un papel clave en el Futuro Sistema Aéreo de Combate (FCAS), el mayor programa de defensa de Europa en el que participan España, Francia y Alemania. La compañía coordina el programa en España y también está al frente de algunos de los pilares tecnológicos entre los que la nube de combate, una herramienta que tendrá cada vez más relevancia en las operaciones militares.
Infodefensa.com ha entrevistado al responsable de la nube de combate del FCAS en Indra, Raúl Castellano, para conocer las claves de esta tecnología.
¿En qué consiste este concepto de nube de combate?
La naturaleza de los conflictos cambia constantemente; aparecen nuevas amenazas a medida que aparecen nuevas tecnologías. Existe una tendencia creciente a la digitalización del entorno de batalla, al final, hay una mayor necesidad de información para alcanzar la superioridad táctica. Una fuerza será más efectiva en la medida que sus activos tienen capacidad para recopilar información, ponerla en común y procesarla. Y, al fin y al cabo, tomar las mejores decisiones y desplegar las medidas oportunas para maximizar los efectos y optimizar el empleo de recursos. La nube de combate cambia radicalmente la forma de capturar, procesar y explotar la información y también la forma de asistir al usuario o usuarios en la toma de decisiones. Genera un macrosistema de información que bebe de los recursos distribuidos por todo el ecosistema de plataformas para generar una infraestructura que virtualmente entrega un espacio de batalla compartido en el que todas las plataformas pueden aportar información a ese espacio y se consolida la información de forma coherente y consistente.
Si ponemos el foco en el FCAS, ¿cómo será la nube de combate?
La nube de combate, entendida como un activo de toda la fuerza, hay que verla como una solución de gran envergadura con un carácter multidominio, multiplataforma y multinivel, al final, la gestión de la seguridad o de las situaciones de conflicto pasa por actividades en el plano estratégico, operacional y táctico. Si visualizamos toda esta problemática a futuro, la nube de combate del FCAS es el extracto que tiene que ver con la intervención de aviones de combate de sexta generación. La tendencia es poner el foco en la fase de ejecución de las misiones, donde quizás la nube llama más la atención, al lograr que cazas y remote carriers actúen como un enjambre coordinado y autónomo, pero también hay que tener en cuenta que, para que el avión de combate realice las misiones en vuelo, hay que ejecutar otras funciones en tierra, por ejemplo, el planeamiento táctico de las misiones. Y además está la última fase, el debriefing también importante para recuperar la lecciones aprendidas de las misiones.
¿Cuál es el papel de Indra en este pilar de la nube de combate?
Indra es líder a nivel nacional en este pilar, lo que implica la coordinación del tejido industrial para su desarrollo y el fomento de soluciones conjuntas.
¿Está qué punto es importante esta tecnología?
La nube de combate cambia el paradigma del desarrollo de los sistemas. Tradicionalmente, el foco estaba puesto en el proceso de la información. Ahora, la nube de combate pone en el centro el dato y todo el sistema se desarrolla en torno al dato.
¿Qué tecnologías marcan la diferencia?
La nube de combate es la combinación de diferentes tecnologías en diferentes categorías. Las tecnologías relacionadas con las comunicaciones que permiten intercambiar los datos; las tecnologías relacionadas con la computación, que dan el músculo para adquirir y procesar la información; y las tecnologías relacionadas con los servicios, básicamente, el mando y control, que proporcionan el valor en última instancia. En comunicaciones aparecen tecnologías de desarrollo de formas de onda de baja probabilidad de detección, radio software, y, sobre todo, tecnologías que permitan orquestar de forma inteligente los medios de comunicación a disposición de la nube (enrutado dinámico de la información, calidad de servicio y gestión integral). En el ámbito de la computación, están tecnologías de la nube que permiten explotar los medios dispersos por toda la fuerza como un único sistema de alta capacidad. Igualmente, hay tecnologías para reducir el hardware de computación para adaptarse a restricciones Swap altas. En el plano de los servicios, la tecnología estrella es la inteligencia artificial que cambiará en el mando y control la forma de asistir al usuario en la toma de decisiones y en la coordinación de la batalla.
¿Qué oportunidades ofrece la nube de combate?
La nube de combate permite trabajar en tecnologías de ultimísima generación y representa una oportunidad para el sector industrial que podrá liderar el desarrollo de tecnologías que guiarán el futuro de la defensa, de la mano además de las Fuerzas Armadas. También permitirá impulsar el talento y además diseñar carreras de alta cualificación y capacitación.
¿En qué fase está Indra ahora mismo?
La nube de combate es una solución de gran envergadura y largo recorrido. Por tanto, no puede desarrollarse o implantarse de golpe, sino que tiene que crecer mediante incrementos de la capacidad. Entre los primeros pasos destaca la definición de una arquitectura de referencia para tener unos principios comunes compartidos por todo el ecosistema de plataformas y unas funcionalidades comunes. Después, hay que desarrollar la base para implementar esa arquitectura. En Indra, ya tenemos una arquitectura de referencia con desarrollos. Estamos en disposición de migrar sistemas heredados hacia ese nuevo concepto de nube y diseñar nuevos sistemas basados en este concepto.
¿Cuál son los próximos pasos?
Trabajamos para diseñar la hoja de ruta de las nuevas capacidades, y, sobre todo, elaborar un plan de transición para llevar el ecosistema actual de plataformas hacia ese futuro de integración en la nube.
La nube de combate es una de las grandes novedades de Indra en Feindef
Indra, desde esta perspectiva, está doblemente representada en el stand del FCAS/NGWS y en el stand de Indra donde presentamos nuestro concepto de nube y desarrollos de la arquitectura de referencia que permitirá integrar de forma progresiva las plataformas en este concepto de combate colaborativo.