Saab destaca la invisibilidad del Gripen ante los nuevos entornos electromagnéticos

Saab ha equipado al Gripen con un sigilio electrónico, en reemplazo del tradicional sigilo físico (stealth), que lo convierte en un caza indetectable para el rival. Además, el sistema desarrollado por la compañía sueca puede evolucionar al mismo rítmo que las amenazas, a través de una rápida actualización del software de sus radares.

El objetivo siempre ha sido el mismo: realizar exitosamente la misión sin ser detectado por el enemigo. Sin embargo, actualmente, la capacidad de pasar inadveritdo se ha vuelto indispensable para los aviones de combate, ante los cada vez más complejos entornos electromagénticos en los que tienen lugar las operaciones militares.

Según ha explicado el director ejecutivo de Gripen para Colombia (país que estudia la adquisición de este caza), Pierre Farkas, “usando su avanzado sistema de guerra electrónica (EW), un Gripen puede ser invisible para un oponente, y el sistema puede actualizarse constantemente de una manera rentable, mientras que el sigilo tradicional tiene costos significativos y limitaciones futuras asociadas”.

El propósito de la EW es asegurar la capacidad de usar y controlar el espectro electromagnético -señales de radio, infrarrojos o radar- para detectar, proteger y comunicarse. Asimismo, se puede utilizar para negar a los adversarios la capacidad de interrumpir o utilizar estas señales. En este sentido, desde Saab explican que el Gripen posee sensores pasivos y activos no solo para proteger el avión sino también para tener una mayor capacidad de ataque electrónico.

De esta manera, el sistema EW del Gripen proporciona alertas de radar y de aproximación de misiles y, al mismo tiempo, el barrido electrónico del radar AESA puede detectar simultáneamente numerosas aeronaves a grandes distancias, mientras es inmune a diferentes tipos de interferencias electrónicas o jamming. Además, el caza de Saab está equipado con una serie de contramedidas activas, como chaffs y bengalas, que engañan al enemigo al crear un objetivo falso.

Sensores completamente integrados

Lo que hace que el sistema de guerra electrónica del Gripen vaya más allá de la capacidad básica que se encuentra en otros aviones de combate, explican desde Saab, es que su sistema EW implica la fusión de sensores al combinar la información que se recoge del radar AESA, el sensor electro-óptico y el IRST.

Estas fuentes y sensores se integran en una combinación de alto nivel y se presentan al piloto en un formato fácil de usar, para aumentar la consciencia situacional y la ventaja táctica. Además, este sistema de EW es actualizable por software, lo que significa que el sistema puede evolucionar al tiempo que las amenazas a lo largo del tiempo.

“La guerra electrónica ha sido un componente importante de Gripen desde el principio. Hoy en día, Saab tiene un sistema pequeño y compacto que reduce la resistencia y aumenta la capacidad general del caza”, sostiene Farkas.