Los jefes de las fuerzas navales de Reino Unido y Francia, Tony Radakin y Christophe Parzuck, se han comprometido en incrementar la colaboración naval entre sus respectivos países. La firma se produjo el jueves a bordo del buque portahelicópteros galo FS Tonnerre. Este acuerdo se enmarca en los planes de creación de una fuerza expedicionaria conjunta anglo-francesa (CJEF), que sus artífices quieren tener totalmente operativa el próximo verano, incluidos sus componentes terrestres y aéreo.
El pacto incluye cooperar en el desarrollo de futuros sistemas de misiles y de contramedidas contra minas, y también proporcionar un marco de funcionamiento de grupos conjuntos de portaaviones franco-británicos.
La alianza se ha oficializado aprovechando la finalización del ejercicio de entrenamiento conjunto entre ambos países Griffin Strike, sobre el que ambos militares han afirmado en una declaración conjunta que están decididos a que este tipo de operaciones “dure y prospere en el futuro”.
En palabras del almirante Radakin, “Francia y el Reino Unido son las dos potencias marítimas líderes en Europa y, por lo tanto [este acuerdo] supone trabajar con un socio que tiene valores similares, intereses similares”, e incluso, añade, que desde “un punto de vista militar tiene capacidades muy similares: portaaviones, submarinos nucleares, elementos disuasivos nucleares y algunas grandes fuerzas anfibias, fragatas y destructores” informa Naval Technologies.
Por su parte, el almirante francés Christophe Prazuck ha destacado que lo significativo de esta firma “es la capacidad para operar conjuntamente en un entorno complejo de operaciones combinadas, lo que supone un ejército, fuerza aérea y armada de los dos países”.
El alto mando francés ha revelado que ambos países llevan trabajando “duro durante muchos años para alcanzar el próximo año capacidades operativas para esta fuerza combinada que permitirá a nuestros dos países operar conjuntamente para encarar cualquier crisis”.