​El Ejército potencia el mando y control, los UGV, los RPAS y la sensorización

El Ejército de Tierra está trabajando dentro del proyecto Fuerza 35 en el impulso de ciertas capacidades que considera claves para avanzar en el diseño de las futuras brigadas de combate como el mando y control, la munición discriminatoria, los sistemas aéreos remotamente tripulados (RPAS), junto con los sistemas antidrón (C-RPAS), y los vehículos terrestres no tripulados (UGV).

De estas capacidades, la prioridad número uno es la mejora de los sistemas de mando y control, con el objetivo de tener la superioridad en la información, destacó el director de Adquisiciones del Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE), general de división José Ramón Pérez, durante la primera jornada del Foro Ejército-Empresas de Toledo. Dentro del proyecto Fuerza 35, el Ejército también apuesta por una sensorización y virtualización de todas las plataformas, equipos y sistemas para lograr una verdadera logística predictiva.

La cuarta edición del foro comenzó con la intervención de la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, quien destacó la necesidad de continuar por "la senda de la obtención de desarrollos industriales propios para alcanzar un nivel de autonomía suficiente" para estar preparados a los complejos escenarios futuros. En la inauguración también intervino el jefe del Mando de Apoyo Logístico del Ejército, teniente general Fernando García y García de las Hijas, que incidió en que el foro es "un punto de soldadura" entre el Ejército de Tierra, las empresas y las universidades.

En las conferencias del primer día también participó el jefe de la División de Planes del Ejército, general de división José Manuel de la Esperanza, que ofreció algunos detalles sobre los avances en el concepto Sistema de Combate Integral (SCI), clave dentro del proyecto Fuerza 2035. A través del SCI, el Ejército aspira a la obtención conjunta de todos los sistemas y equipos necesarios en una brigada.

La DGAM, comentó, ya ha abierto una oficina de programa para poner en marcha este nuevo modelo de adquisición del material, con cuatro oficial de Estado Mayor del Ejército. Por otra parte, De la Esperanza informó de que el Ejército trabaja en la racionalización de las plantillas dentro del proyecto Fuerza 35 con la vista puesta en 2025. De hecho, ya está lista la nueva plantilla de personal de la Brigada Experimental.

Por su parte, el general de brigada Melchor Marín, jefe de la Legión y comandante de la Brigada Experimental, profundizó en las pruebas con materiales realizadas a lo largo de este año por la brigada que dirige. En la línea con las necesidades identificadas, la Legión ha puesto el foco en 2021 en la experimentación con el puesto de mando con varios objetivos: la integración en tiempo real de todas las funciones del combate, gestionar e integrar toda la información, reducir la firma térmica y aumentar la capacidad de despliegue. La unidad ha trabajado con dos puestos de mando gemelos y uno de apoyo en retaguardia.

La jornada también estuvo presente el general de división Iñigo Pareja, jefe de la División de Planes del Estado Mayor Conjunto, que habló sobre los retos tecnológicos y la necesidad de transformación digital. “Hay que saber gestionar el acceso masivo al dato”, puntualizó. La superioridad tecnológica presenta desafíos, resaltó, como el uso masivo y dependencia precisamente de las tecnologías, por lo que hay que saber actuar en entornos degradados.

A su juicio, la tecnología de gestión del dato y la inteligencia artificial será muy importantes y tendrán que tener como soporte otras tecnologías, especialmente, la nube y el 5G. “Hay que ser capaces de gestionar el acceso a la información para que desde el soldado al general tenga capacidad de decir cada uno a su nivel”, manifestó. Asimismo, dijo que es fundamental la apuesta por la innovación con la industria y la universidad y estrechar el gap entre el inicio del proceso de compra y la entrada en servicio del material. El general Pareja, por último, incidió en que la digitalización de una prioridad del Jemad.

Las empresas también tuvieron voz en este primer día de la mano de las asociaciones CEOE, Aesmide y Tedae. Las tres coincidieron que resulta clave encuentros como el de Toledo que permiten a la industria conocer los requerimientos futuros del Ejército y enfocar sus esfuerzos en la I+D+i.

Exposición de materiales

Por la tarde, la explanada principal de la Academia de Infantería acogió una exposición de materiales en la que la empresa Santa Bárbara Sistemas mostró por primera vez su UGV Mutt con una estación de armas de Escribano. También estuvo la nueva radio del Vehículo de Combate sobre Ruedas (VCR) 8x8 de la UTE formada por Telefónica, Elbit y Aicox y el nuevo vehículo ligero de operaciones especiales Neton de la empresa Einsa. 

La exposición se completó con otros materiales como el robot cuadrúpedo de Ghost Robotics-Paukner, el UGV Caronte del Batallón de Zapadores de la Brigada Guadarrama XII, el exoesqueleto Exobudoy de Interspring-Iturri, una maqueta del misil de Enforcer de MBDA y un kit de munición guiada FGK de Escribano. Estos materiales, denominados por el Ejército como Potenciadores, son el resultado de algunos de los proyectos de I+D+i en los que trabaja las empresas del sector en el marco del concepto Fuerza 35 y están siendo evaluados en la Brigada Experimental, la Legión.

La cuarta edición del Foro Ejército-Empresas está patrocinada por Indra, Expal, Navantia, John Cockerill, GDELS-SBS, Grupo 20, Leonardo Hispania, Sapa Placencia, SDLE, Tecnobit, Urovesa, Aertec, Vestlife-Aitex, Airbus Helicopters, Arquimea Group, Einsa, DSV, Escribano, Gahn, Hisdesat, IAI, Inster, Sas Corp, Sener, Thales y Grupo TRC.