Amorim aboga por que el presupuesto de Defensa de Brasil alcance el mismo nivel que en resto del grupo BRICS

(Infodefensa.com) R. Caiafa, Sao Paulo – El presupuesto para Defensa en Brasil debería ser equivalente a los de los países que componen el bloque BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). Una apreciación de ministro de Defensa brasileño, Celso Amorim, durante audiencia pública en la pasada Comisión de Relaciones Exteriores y Defensa Nacional del Senado Federal.

“Si queremos hablar como uno de los BRICS, nuestro presupuesto de Defensa tiene que llegar a la media de los presupuestos de ellos”, afirmó el ministro. Según Amorim, esto no es una cuestión del Gobierno, más de la sociedad como un todo, que tiene que entender esta necesidad.

Según los datos presentados por el ministro, Brasil invierte cerca del 1,5% de su producto interior bruto en Defensa, mientras los demás países del bloque alcanzan el 2,4%, aproximadamente.

Celso Amorim acudió al Senado para hablar sobre la situación de las Fuerzas Armadas en el escenario actual y futuro. Durante su exposición, trató de temas como la cooperación con socios de América del Sur, protección de fronteras, modernización de los equipos militares e incentivos a la industria de Defensa.

En cuanto al presupuesto, Amorim afirmó que se ha avanzado en la transferencia de recursos, pero aunque son insuficientes para hacer frente a las demandas del sector de Defensa brasileño. De acuerdo con el ministro, entre 2002 y 2003, el presupuesto estaba en torno los 45.000 millones de reales (23.400 millones de dólares, aproximadamente), y en 2012 llegó a los 65.000 millones de reales (cerca de 33.800 millones de dólares).

Amorim hizo referencia también a la importancia de profundicar en los ya “altos niveles de confianza” con países vecinos en América del Sur. “Debemos crear un cinturón de buena voluntad alrededor de Brasil”, indicó. “con una convivencia pacífica y próspera, seremos capaces de seguir proyectando nuestra presencia en otras regiones del globo”.

Celso Amorim inició una exposición haciendo hincapié en que la realidad brasileña hoy difiere de la del periodo en que ocupa el Ministerio de las Relaciones Exteriores (MRE) en el Gobierno de Itamar Franco. En aquella época, conforme explicó, Estados Unidos entendían que el papel de las Fuerzas Armadas de países sudamericanos era cuidar de asuntos de combate a las drogas y criminalidad, pero hoy esa posición ha cambiado.

En la reunión con el secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, hubo un reconocimiento a la legitimidad de Brasil como nueva fuerza global, de promover inversiones militares. Esto, en opinión de Amorim, demuestra la moderna percepción internacional que se tiene del país. “Si algún estadista fuese a crear el G-7, no dejaría a Brasil fuera”, reforzó el ministro.