Iveco Veículos de Defesa recibe el World Class Manufacturing Award

La planta de Iveco Veículos de Defesa en Sete Lagoas ha alcanzado el nivel de bronce en el programa World Class Manufacturing (WCM), uno de los estándares más altos de la industria manufacturera en el mundo.

El reconocimiento representa un importante logro para la planta en su constante búsqueda de mejoras en los procesos y la excelencia en la producción.

Inaugurada en 2013, la estructura tiene 30.000 m², de los cuales 18.000 son de área cubierta (producción y logística), y fue la primera en fabricar productos de defensa fuera de Europa.

El primer producto nacional fue el Vehículo Blindado para Transporte de Personal (VBTP-MR), más conocido como Guaraní, fruto de la asociación de la empresa con el Ejército brasileño.

Hasta ahora se han entregado más de 450 unidades al ejército.

"Este logro es el resultado del esfuerzo y la competencia de todo nuestro equipo en Sete Lagoas. La planta de defensa es extremadamente compleja y tiene un proceso 100 % manual, que depende de mucha calificación y dedicación de todos los operadores. También tenemos un área de soldadura de acero balístico, que exige conocimientos muy específicos", dice el director industrial de la planta, Izidro Penatti.

Con capacidad para transportar hasta once personas, el Guaraní pesa 18 toneladas, tiene tracción 6X6, puede alcanzar 110 km/h y tiene función anfibia.

Además de la climatización, presenta una serie de innovaciones tecnológicas, como el sistema automático de detección y extinción de incendios y la baja firma térmica, que dificulta su localización, entre otras.

"Hemos hecho un trabajo consistente en todo nuestro complejo industrial, no sólo en la planta de defensa, sino también en los vehículos y motores comerciales, que completó 20 años en 2020. Continuaremos con las mejores prácticas de la WCM, mejorando cada vez más nuestros procesos y la producción industrial", añade Penatti.

El Guaraní

Las unidades entregadas al Ejército brasileño se utilizan en misiones de mantenimiento de la paz y en operaciones de lucha contra el crimen organizado en las regiones fronterizas del país.

La plataforma blindada puede utilizarse como base para el desarrollo y la producción de una familia de blindados en diferentes versiones, que incluyen vehículos de reconocimiento, rescate, puesto de mando, asesinos y ambulancias.

El vehículo blindado tiene el motor Cursor 9 Euro V, de FPT Industrial.

El Cursor "militar" fue configurado para entregar 380 hp.

Especialmente para la aplicación en el Guaraní, el motor recibió refuerzos para cumplir con los requisitos de la aplicación militar.

Empezando por el blindaje del alternador, responsable de la gestión de las fuentes de energía eléctrica como la batería, y el módulo de inyección electrónica de combustible.

Además de estar blindado, el módulo fue montado en una zona más protegida del vehículo.

Las cubiertas de la cabeza del motor, originalmente hechas de plástico, fueron reemplazadas por cubiertas de hierro fundido.

Fuerte aceleración y respuesta rápida.

Estas características marcan el rendimiento del motor del Cursor 9, y son el resultado de las altas presiones de inyección de diesel de la electrónica del motor, que favorecen la pulverización del combustible en la cámara de combustión, y por consiguiente permiten una combustión más eficiente.

Para tener una idea, la presión de inyección de un motor de gasolina convencional en un coche popular alcanza los tres bares, mientras que el motor industrial FPT alcanza los 1.800 bares.

Además de ser potente y fuerte, el motor tiene una vida útil de 8.000 horas.

Imágenes: Roberto Caiafa