España contaba con 24 navíos de línea, 7 fragatas y un bergantín, sumando en total 2.638 cañones; por su parte, el británico John Jervis lideraba 15 navíos de línea, cuatro fragatas, dos balandros y un cúter, sumando 1.430 cañones. Entre los barcos españoles estaba el Santísima Trinidad, el mayor buque de guerra del mundo por aquél entonces, que contaba con 136 cañones. Dicha flota, liderada por el general José de Córdova, partió de Cartagena en febrero de dicho año. Antes de llegar a Cádiz, la flota fue sorprendida por un temporal al mismo tiempo que la flota británica interceptaba los barcos españoles.El día 14, ambas flotas se encontraban en situación de enfrentarse.
El conflicto seguía al levantamiento del Corpus de Sangre del 7 de junio de 1640.El 26 de enero, las tropas de Felipe IV iniciarion la ofensiva en la montaña de Montjuic desde tres lugares: desde el Llobregat; desde Sants; y desde la ermita de Santa Madrona.
Esta labor la realiza junto a la investigadora Bárbara Rojas, coordinadora de logísticas de la expedición. La insignia del proyecto Hielo V, la cual refleja las labores realizadas en el Territorio Chileno AntárticoDesafíos del territorioLa preparación y planificación de los exploradores del Escuadrón de Exploración Aeromarítima VP 1 resultan fundamentales al momento de efectuar los sobrevuelos en el Territorio Chileno Antártico, considerando las condiciones extremas que presenta uno de los rincones más inhóspitos del mundo.El comandante de aeronave, capitán de fragata Tomás Iturriaga, señaló que son diferentes los desafíos que se deben considerar para el desarrollo de estos vuelos.
Esta ofensiva ocurrió durante la guerra del Pacífico, que se desarrolló entre los años 1879 y 1884.El contingente chileno, mandado por Erasmo Escala, estaba formado por unos 8.900 soldados y las piezas de artillería naval con la que contaba la escuadra chilena.
La debilidad de los soldados que habían hecho un largo viaje por mar, unido a la falta de suministros y la borrachera causada por el vino en muchos de ellos, obligó a Cecil a llevar de nuevo a sus tropas a los navíos y retirarse de la ciudad.
Tal día como hoy, 31 de octubre, pero de 1873, la Armada española capturó el barco de vapor estadounidense Virginius, que utilizaban los revolucionarios cubanos, en una acción conocida posteriormente como el Asunto del Virginius.
Antes de llegar ante las tropas enemigas, se decidió que las tropas castellanas mandadas por Alfonso XI de Castilla se enfrentaran al contingente del rey Abu Al-Hassan Alí mientras que las de Alfonso IV de Portugal lidiaban con las de rey de Granada Yusuf I.La caballería castellana cruzó el río Salado, lugar en el que se encontraban sus enemigos, y allí comenzó el enfrentamiento.
Guáimaro estaba fuertemente defendida por el ejército fiel a la corona española, sin embargo, las tropas revolucionarias lograron tomar una por una las fortificaciones en las que los españoles se parapetaban.
Tal día como hoy, 27 de octubre, pero de 1807, España y Francia firman el Tratado de Fontainebleau, en el que ambas naciones se unen para invadir de forma conjunta a Portugal debido a la alianza de este último con Reino Unido.
Finalmente, un jueves 26 de octubre, la expedición llegó a un riachuelo donde pudieron acampar y dieron por finalizado el viaje por el desierto al llegar al que es conocido a día de hoy como el valle de Copiapó.Al internarse en el valle, los exploradores se toparon con el pueblo diaguita, que contaba con 8.000 guerreros para defenderse.
La capitulación supuso el fin de la llamada guerra de las Comunidades de Castilla, que enfrentó a realistas y a comuneros tras el levantamiento de estos en contra de los poderes señoriales, algunos historiadores consideran esta guerra como una de las primeras revoluciones burguesas de la Edad Moderna.La rendición de Toledo se produjo meses después de la derrota de los comuneros en la batalla de Villalar, que se saldó con unas 1.000 bajas en sus tropas y la decapitación de tres de sus líderes: Juan de Padilla, Juan Bravo y Francisco Maldonado.
Tal día como hoy, 23 de octubre, pero de 1739, el primer ministro británico, Robert Walpole, declaró la guerra a España en una contienda que sería conocida posteriormente como la guerra del Asiento.
Tal día como hoy, 21 de octubre, pero de 1094, las tropas del señorío de Valencia, mandadas por Rodrigo Díaz de Vivar, conocido como el Cid Campeador, se enfrentaron a un contingente almorávide (movimiento religioso fundamentalista) cerca de los municipios de Mislata y Cuart de Poblet, cercanos a la ciudad de Valencia.
Los aliados, sorprendidos de la llegada inesperada de los refuerzos enemigos, abandonaron inmediatamente el asedio, retirándose hacia sus naves mientras eran perseguidos por los soldados de los tercios. En la contienda 2.000 soldados neerlandeses e ingleses perdieron la vida mientras que los españoles apenas acusaron bajas.
Tal día como hoy, 19 de octubre, pero de 1816, se desarrolla el enfrentamiento conocido como la batalla de Ibirocaí entre las tropas de la Provincia Oriental, una división administrativa de la Liga General (constituida por las provincias de Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, la Provincia Oriental, Santa Fe y los pueblos de Misiones) y las tropas del Reino Unido de Portugal, Brasil y Algarve (entidad que existió de 1815 a 1822), que se alzaron con la victoria.Los 700 soldados de la Provincia Oriental estaban bajo el mando del teniente uruguayo José Antonio Berdún, mientras que las tropas de Reino Unido de Portugal, Brasil y Algarve, unos 550 efectivos, estaban mandadas por el brigadier Juan de Dios Mena Barreto.Las tropas orientales ingresaron en territorio brasileño con el objetivo de recuperar territorio, sin embargo, la maniobra fue interceptada por el comandante portugués Joaquín Javier Curado, lo que inició los movimientos de defensa por parte de Mena.
Durante años, los de Tlaxcala habían mantenido constantes batallas con los cholultecas, por lo que su alianza con los españoles se mantuvo en secreto. Los anfitriones de los europeos, sospechando esta unión, prepararon el terreno para emboscar a sus invitados o, por lo menos, eso fue lo que alegaron los conquistadores para justificar su ataque y arrestar a los gobernantes de la ciudad.Se calcula que en la contienda participaron por parte de los aliados 400 soldados españoles armados con arcabuces, ballestas y armas blancas junto a 400 totonacas y 3.000 tlaxcaltecas.
El director de operaciones de Vidal era Domingo Nieto, que resultó herido en la cabeza durante la batalla, aunque continuó en su puesto.Vidal se dio por vencido y decidió retirarse, sin embargo, Nieto continuó con las operaciones ofensivas, que sorprendieron a las tropas de Torrijo y los obligó a retirarse.
El condestable portugués cambió de estrategia y cargó contras los castellanos para enfrentarse personalmente contra Godoy.El Gran Maestre resultó herido de muerte en el enfrentamiento directo contra Álvares, lo que derivó en la ruptura de la formación castellana y la desmoralización de sus tropas.
El ataque castellano y granadino estuvo mandado por el rey Sancho IV de Castilla, hijo de Alfonso X El Sabio, y el de las tropas de la República de Génova por el almirante Benedetto Zaccaria, meintras que los aragoneses estaban a las órdenes de Berenguer de Montoliú.
Estos contigentes solían provocar guerras no autorizadas por el Gobierno de los EEUU. La batalla de Masaya fue uno de estos casos.El ejército filibustero estaba empeñado en desalojar a los aliados de sus fortificaciones en Masaya, puesto que se encontraban a tan solo un día de marcha de la ciudad de Granada, zona bajo el control de Walker.