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KDA y SMS amplían su colaboración en el programa del misil noruego NSM para la Armada
La empresa noruega Kongsberg Defence and Aerospace (KDA) y la española SMS han ampliado la cooperación firmada en un memorándum de entendimiento (MoU) en mayo del año pasado sobre el programa del misil escandinavo Naval Strike Missile (NSM). Este misil sustituirá a los veteranos Boeing RGM-84 Harpoon en las fragatas F-100, y también se integrará en las futuras F-110 y en el submarino S-80. Es más, no se descarta su incorporación a otras plataformas. De hecho, desde ambas compañías se ha mostrado su interés en “seguir ampliando la cooperación para la integración del misil NSM en otras plataformas de interés para el Ministerio de Defensa”.
Los esfuerzos de SMS en este programa, según se ha explicado desde la empresa, “se centran en satisfacer los requisitos de la Armada sobre el futuro modelo de apoyo logístico a lo largo del ciclo de vida para el NSM en España, de acuerdo con las directrices que marca la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) en la recientemente publicada Estrategia Industrial de Defensa”.
Más allá de ese apoyo logístico, el programa NSM para España incluye también sistemas, misiles, logística y oportunidades de I+D en los que estarán implicadas empresas nacionales como Sener y Navantia, además de SMS que ya trabaja con KDA en el estudio para meter el misil, o incluso la versión JSM, en el S-80 y otras cuestiones importantes, como por ejemplo el encapsulado del NSM que permite el lanzamiento y despliegue seguro del misil.
Características del misil
El NSM cuenta con un sistema de navegación con GPS militar y un altímetro láser que le permiten sobrevolar tierra haciendo lo que se conoce como Comparación de Terreno. En este modo, adquiere el blanco con el mismo sistema de identificación por imágenes que emplea contra buques.
Se trata de un misil de última generación, con un alcance próximo a los 200 kilómetros y una velocidad de 0,9 Mach. El NSM selecciona su objetivo mediante un novedoso sistema de identificación inteligente de imágenes infrarrojas que emplea unas sofisticadas cámaras y procesa las imágenes con un complejo algoritmo de reconocimiento del objetivo.
Este sistema le permite discriminar al blanco deseado entre otros buques o señuelos y sortear cualquier obstáculo que se encuentre en su trayectoria, lo que evita impactos ciegos o adquisiciones de blancos no deseados, cuestión de vital importancia, resalta la Armada, en un arma del tipo “dispara y olvida” como son los misiles antibuque.
Su fuselaje, con diseño furtivo y materiales que absorben la radiación, junto con su perfil de vuelo roza olas, hacen de este misil un blanco muy difícil de detectar y neutralizar. Destaca también su capacidad de generar daños en el objetivo gracias a una cabeza de combate de alto explosivo revestida con una carcasa de titanio y una espoleta de última generación configurable según el nivel de penetración en función del blindaje y los daños deseados en el blanco.
