EEUU negocia con Textron y GDLS un nuevo vehículo para los marines

Las compañías estadounidenses Textron Systems y General Dynamics Land Sistems (GDLS) han sido seleccionadas por el Cuerpo de Marines de EEUU para negociar la construcción de prototipos de un vehículo de reconocimiento avanzado (ARV, por sus siglas en inglés). Al mismo tiempo, el mismo servicio trabajará con la firma británica BAE Systems para adaptar como ARV un vehículo de combate anfibio y a existente

Tanto Textron como GDLS ya han presentado sus opciones a este programa. Por su parte, GDLS, que es el fabricante del vehículo de combate de infantería 8x8 LAV-25, actualmente en servicio en el Cuerpo de Marines, llevó su propuesta de prototipo de ARV al Cuerpo de Marines antes del pasado 3 de mayo, que era la fecha límite para hacerlo. Mientras que Textron anunció antes de ese momento que competirá con un prototipo que ya ha construido y probado denominado Cottonmouth, de tracción 6x6.

En cuanto a BAE Systems, que es el fabricante del vehículo anfibio que actualmente utilizan los marines estadounidenses, distintas fuentes creen que sí ha presentado una oferta, informa Defense News, si bien la empresa no lo ha confirmado.

Una flota de 600 blindados

La intención del Cuerpo de Marines es contar con propuestas para el desarrollo de un prototipo de vehículo anfibio de combate con el que sustituir a los en torno a 600 LAV-25 con los que cuenta en la actualidad, y que datan de los años 1980.

El Cuerpo de Marines ha revelado en un comunicado que esta “iniciativa clave de modernización de la Fuerza de Marines”, incluirá elementos de mando, control, comunicaciones y ordenadores (C4, por sus siglas en inglés) y sistemas aéreos no tripulados (UAS). De ahí que lo denomine ARV C4/UAS.

El calendario previsto marca una duración de 22 meses para el contrato, durante los que se deberán construir y evaluar los prototipos, cuya entrega está prevista para el primer trimestre del año fiscal 2023. En total, el Cuerpo de Marines empleará seis meses a probarlos. El plan contempla la construcción de medio millar de vehículos dentro de un programa al que se le estima un valor de entre 1.800 y 6.800 millones de dólares durante cinco años.