Por primera vez, aviones de combate del Ejército del Aire y del Espacio español participarán en una misión de policía aérea de la OTAN en Islandia. El Ala 15 desplegará a finales de julio seis cazas F-18 en el país nórdico, en concreto, en la base aérea de Keflavik, situada al sur de la isla, según ha adelantado Vozpopuli y ha confirmado Infodefensa.
La misión tendrá una duración aproximada de un mes. El Ejército del Aire y del Espacio cuenta con una amplia experiencia en operaciones de policía aérea en el flanco este de la Alianza, en las repúblicas bálticas, y más recientemente, en Rumanía y Bulgaria.
Islandia es uno de los países de la OTAN, junto con Estonia, Letonia y Lituania, que no dispone de una fuerza aérea capaz de proteger su espacio aéreo. Esta misión recae en otros socios de la Alianza que llevan a cabo de forma rotatoria despliegues de sus cazas.
Además de los pilotos y cazas, el destacamento, como es habitual, estará formado por mecánicos, armeros, personal de seguridad o ingenieros, la parte menos visible, pero igualmente importante. Todos forman un solo equipo perfectamente engrasado que a la postre garantiza el éxito de cada misión.
Las operaciones de policía aérea se han intensificado en la última década para hacer frente a la creciente amenaza rusa. Inicialmente, la OTAN puso el foco en las repúblicas bálticas y después extendió el concepto de misión, conforme las hostilidades con Putin aumentaban, al flanco sureste (Rumanía y Bulgaria) y al extremo norte (Islandia).
La principal misión de los cazas aliados es interceptar aviones de la Federación rusa que se aproximan al espacio aéreo aliado sin cumplir las reglas del juego, es decir, operan con el transpondedor apagado y sin plan de vuelo o no contestan a los mensajes por radio. Los pilotos están adiestrados para despegar, en el caso español, a bordo de los Eurofighter y los F-18, en menos de 15 minutos, tras recibir el aviso.
El Ártico, una región en disputa
En el caso de Islandia, la base aérea de Keflavik es un punto estratégico para controlar los movimientos de las fuerzas rusas en el Ártico, que transita frecuentemente por aire y también por mar en el amplio corredor que existe entre Islandia y Noruega.
La tensión entre la OTAN y Rusia también ha crecido en esta región, el flanco norte para la Alianza, lo que se ha traducido en un incremento de la presencia militar por ambas partes. Estados Unidos, por ejemplo, ha enviado por primera vez un submarino nuclear a Islandia.