El Buque de Proyección Estratégica (BPE) Juan Carlos I de la Armada ha entrado este jueves en el dique de Navantia Puerto Real, donde se someterá durante aproximadamente seis meses a la modernización de su sistema de propulsión y al plan de inmovilización programada (PIP).
La Armada decidió hace cuatro años cambiar los dos POD de propulsión Siemens de por otros dos tipo azimutales equivalentes de ABB, modelo Azipod MO1800. El contrato, firmado con Navantia a principios de 2023, tiene un presupuesto de 30 millones de euros. Detrás de la sustitución, están los repetidos fallos y averías del actual sistema desde la entrada en servicio del buque de proyección estratégica en 2010.
El principal objetivo es solventar los problemas de vibraciones inducidas que tiene la propulsión y además dotar al buque de un nuevo sistema más avanzado para afrontar con garantías la segunda mitad de la vida operativa.
El reemplazo tendrá lugar tras la aprobación de la Armada y después de la celebración el pasado día 10 de la 21º reunión de seguimiento de contrato de cambio de POD. La Armada reiteró en dicha reunión su satisfacción con la gestión del programa realizada por Navantia, el avance del mismo y la calidad de la documentación recibida. Después de tres años de trabajo en fases de ingeniería y compras, el programa entra ahora en la fase de producción con la llegada del buque este jueves al dique de Puerto Real.
Detalle de los trabajos
La obra de cambio de POD y sus periféricos a bordo requiere la realización de tres grandes cesáreas en el casco, así como la fabricación de nuevos bloques de acero para el anclaje de dichos propulsores.
Además, será necesario el reconexionado de más de 66 kilómetros de cable, de los que 40 kilómetros serán completamente nuevos. También incluirá una nueva versión software del Sistema Integrado de Control de Plataforma (SICP), recogiendo estos cambios.
El buque, tras desembarcar el arma aérea y prepararlo para su inmovilización, se ha trasladado desde la base naval de Rota al dique del astillero de Puerto Real.
Esta larga inmovilización programada (PIP) se extenderá por casi seis meses e incluirá asimismo obras contempladas en su plan de mantenimiento y trabajos de actualización a nuevos sistemas, renovación del sistema de ventilación y climatización (HVAC), así como el mantenimiento integral y puesta en operación de sus grupos diésel mediante un W7, entre otras, lo que implica la coordinación de las actividades de los Negocios de Motores, Reparaciones Cádiz y de Sistemas de control (SICP).