Soldados conscriptos del Regimiento N°12 Sangra de la III División de Montaña del Ejército de Chile ejercitaron sus capacidades de combate cuerpo a cuerpo para poder desenvolverse en un ambiente hostil y estar preparado para actuar ante cualquier adversidad.
Según la institución, el entrenamiento tiene como finalidad mejorar la eficiencia operacional en lo que respecta al combate cuerpo a cuerpo, y se divide en módulos de lucha de pie, lucha de suelo y combate con armas.
Con respecto al entrenamiento, el sargento 2° Ricardo Concha, instructor en el Regimiento N°12 Sangra, explicó que “es uno de los pilares que debe tener un soldado. No son instrucciones básicas ni sencillas, por lo cual se busca que nuestros efectivos se vayan superando día a día con estos desafíos”.
Por su parte, el soldado conscripto Benjamín Reyes, perteneciente al Regimiento N° 12 Sangra, quien participó en los ejercicios, considera que son importantes ya que “nos ayuda a conocer nuestros límites físicos y mentales. Además, podemos aumentar nuestras capacidades combativas y nos entrega una mayor confianza en nosotros mismos”.