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El KC-390 Millennium de la FAB transporta el sistema Astros II durante el ejercicio Airlift Comao 2025
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) transportó el sistema lanzacohetes múltiple Astros II utilizando el avión KC-390 Millennium durante el Ejercicio Operacional Airlift Comao 2025, llevado a cabo en la Base Aérea de Anápolis (BAAN).
La operación representó un importante avance en la evaluación de la transportabilidad aérea de vehículos blindados, en un escenario de acción conjunta con el Ejército Brasileño (EB).
Según se informó, el objetivo ha sido probar la eficacia y seguridad del sistema de transporte aéreo para el Astros II, considerado uno de los más modernos de su categoría.
Diseñado en Brasil, el Astros II es un vehículo de artillería autopropulsado capaz de disparar cohetes de diferentes calibres con gran precisión.
Dispone de sistemas de mando y control, comunicaciones y apoyo logístico, y es esencial en misiones de apoyo de fuego e interdicción de áreas estratégicas. El vehículo utilizado pertenece al 16º Grupo de Misiles y Cohetes (16º GMF) - Grupo Visconde de São Leopoldo, con sede en Formosa (GO).
La misión fue conducida por el Primer Grupo de Transporte de Tropas (1º GTT) —Escuadrón Zeus— responsable por la operación con la aeronave KC-390.
Con un peso aproximado de 24 toneladas, el vehículo fue cargado después de los procedimientos de preparación, anclaje y pruebas en tierra, como el rodaje de la aeronave.
A propósito de esto, el Oficial de Operaciones del 1º GTT, Mayor Anderson Dias Santiago, indicó: "Durante el ejercicio Airlift Comao, el avión KC-390 Millennium llevó a cabo diversas misiones, como lanzamientos, infiltración y evacuación aeromédica. Con la movilización del vehículo Astros II del Ejército Brasileño, no sólo reforzamos la interoperabilidad entre la FAB y el EB, sino que también demostramos la gran capacidad de carga y versatilidad del KC-390. Esta operación demuestra concretamente la preparación y la disposición de nuestras Fuerzas para cumplir misiones cada vez más complejas y estratégicas".
La operación finalizó con un aterrizaje de máximo rendimiento y el desembarco seguro del vehículo, consolidando los objetivos de la misión.
La actividad también evaluó la capacidad de movilización del Astros II en misiones diurnas y nocturnas, reforzando la doctrina de respuesta rápida de la FAB y la integración logística con el Ejército en operaciones de alta complejidad.
