EEUU percibe una mayor estabilidad en América Latina

(Infodefensa.com) Washington - El secretario de Estado adjunto de Estados Unidos para Latinoamérica, Arturo Valenzuela, ha considerado que el año 2010 acaba con una mayor estabilidad en la región, en la que la posibilidad de un conflicto entre países como Colombia y Venezuela han disminuido. En una rueda de prensa en la que hizo balance sobre la situación en América Latina, Valenzuela dijo que EE.UU. ve con "mucho optimismo" la situación de la región, "no tan polarizada como antes".

Destacó que siguen avanzando los procesos de consolidación democrática en la mayoría de los países de la región, que ha mostrado más voluntad de cooperación y que ha logrado sortear la crisis económica mundial con un crecimiento promedio del seis por ciento. "Se vislumbra una situación de mayor estabilidad regional donde los peligros que podían haber existido anteriormente con un conflicto, por ejemplo entre Colombia y Venezuela, han bajado de forma importante", dijo Valenzuela.

En cuanto al desacuerdo entre Costa Rica y Nicaragua por el dragado de un río fronterizo señaló que es algo que desde el Gobierno estadounidense se ve "con tranquilidad dentro de lo que ha exigido la OEA", que ha emitido una serie de recomendaciones.

Estados Unidos quiere seguir trabajando con los países de la región para "solucionar problemas que nos conciernen a todos" como la inseguridad ciudadana, la competitividad, la exclusión social y las desigualdades de la región, señaló Valenzuela. Asimismo, espera avanzar en otros asuntos como el cambio climático, las energías alternativas, fortalecer las instituciones y la gobernabilidad.

Estados Unidos busca mejorar la cooperación y uno de sus focos será la seguridad en la región centroamericana, como se habló en la reunión trilateral anual entre EE.UU., Canadá y México.

El funcionario afirmó que Estados Unidos ha desarrollado una diplomacia "contundente" hacia la región, y señaló que las buenas relaciones con los vecinos del sur no se han visto afectadas por la filtración de los cables diplomáticos publicados por WikiLeaks. "Hemos conversado con presidentes, cancilleres y otras personas de la región explicando y pidiendo disculpas por esta filtración, pero por suerte hemos visto una buena disposición a aceptar nuestras explicaciones y dar vuelta a la página en este tema", señaló.