El Ejército del Aire y del Espacio despidió hace unos días, tras casi 50 años en servicio, su último avión de patrulla marítima P3 Orion en una ceremonia en la base aérea de Morón de la Frontera en Sevilla. En la despedida participaron antiguos y actuales miembros de la unidad que pudieron dar un último adiós a esta a esta aeronave histórica. De esta forma, el Ejército del Aire pierde su capacidad de patrulla marítima de forma temporal hasta la llegada de los nuevos C295 MPA, un programa que Airbus y el Ministerio de Defensa tienen previsto firmar a principios del próximo año. La siguiente galería de fotos reúne las principales imágenes del acto.Fotos: SAES y Ejército del Aire y del Espacio
La española SAES dotará a estos aviones con su Sistema Procesador Acústico de Sonoboyas (SPAS) 32 para guerra antisubmarina. La empresa explica que el SPAS es un sistema totalmente integrado con el Sistema Táctico de Misión (STM) que permite al operador acústico detectar, localizar, clasificar y seguir a submarinos y buques de superficie mediante los datos acústicos activos y pasivos provenientes de las sonoboyas desplegadas. Airbus y la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) tienen previsto firmar el contrato de compra de los C295 de la versión MPA, con capacidades de guerra antisubmarina también, en el primer trimestre de 2023, según informó el fabricante del avión.
La Armada ha recibido el visto bueno del Gobierno a un contrato marco valorado en 62 millones de euros para la revisión y mantenimiento de los aviones y helicópteros que forman parte de la Flotilla de Aeronaves (Floan).Este acuerdo marco persigue generar y aprovechar sinergias, imprimir uniformidad y homogeneidad en la ejecución de los contratos, optimizar capacidades y conocimientos, evitar fragmentación excesiva de contratos y generar economías de escala, según informa Defensa.El ministerio explica que el actual contrato para los servicios de sostenimiento e ingeniería de todas sus aeronaves, tanto de ala fija como de ala rotatoria, vence a final de este 2022, y, por lo tanto, es necesaria su renovación.De acuerdo con el anuncio previo del contrato, publicado hace unos meses por la Armada, la licitación tiene un presupuesto es de 36,8 millones de euros, sin embargo, el valor estimado supera los 62 millones al incluir posibles prórrogas, en concreto, 62.200.000 euros.El contrato abarcará prácticamente todas las plataformas operativas en la Flotilla de Aeronaves en la actualidad: AB212 de la 3ª Escuadrilla; Cessna Citation de la 4ª Escuadrilla; SH-60F de la 5ª Escuadrilla; Hughes 500MD de la 6ª Escuadrilla; AV8B Harrier de la 9ª Escuadrilla y SH-60B de la 10ª Escuadrilla.La empresa adjudicataria llevará a cabo diversos trabajos desde el mantenimiento programado, hasta nivel overhaul, tanto de aeronaves como sus componentes, equipamientos y accesorios; como el mantenimiento correctivo, defectos, averías, reparaciones y pintura de aeronaves y sus componentes; hasta reparaciones de aeronaves, reparación estructural de célula, fabricación de piezas estructurales, equipos y utillaje, tratamientos de materiales, y pruebas de las aeronaves y sus accesorios, entre otros.El último contrato de estas características fue adjudicado a mediados de 2018 a una unión temporal de empresa formada por Airbus Defense and Space y Airbus Helicopters España.
El INTA pasa a ser a partir de ahora el titular del avión, si bien la aeronave continuará en las instalaciones de Airbus para la instalación de los diferentes equipos y sistemas que llevará a bordo y no entrará en servicio hasta mediados de 2023, de acuerdo con el calendario del programa acordado entre el Ministerio de Defensa y el fabricante.
El Ejército del Aire y del Espacio ha abierto una licitación con un presupuesto de casi nueve millones de euros para la adquisición de mulas hidráulicas eléctricas descontaminantes durante los dos próximos años. Los pliegos del contrato explican que estos equipos son “imprescindibles para las operaciones de mantenimiento de los sistemas hidráulicos de las aeronaves del Ejército del Aire”.
La historia del avión de patrulla marítima P.3 Orion llega a su fin en España. El Ejército del Aire y del Espacio ha despedido, tras casi 50 años en servicio, al último avión de este modelo en servicio en el Grupo 22 de Fuerzas Aéreas del Ala 11 en una ceremonia en la base aérea de Morón de la Frontera en Sevilla. La aeronave finalizó su vida operativa el pasado 1 de enero tras completar una misión en la operación Atalanta de lucha contra la piratería en el cuerno de África, donde ha estado desplegada los últimos 14 años.
Más allá de la foto, la empresa espera cerrar el contrato de cuatro C-295 MPA, los que sustituirán a los P.3, en pocos meses, en el primer trimestre del próximo año, y está cerrando los últimos flecos de la configuración de la aeronave con la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) y el Ejército del Aire después de meses de negociaciones.
En este sentido, la Sedef recordó al sector que “no puede trabajar como lo venía haciendo, tiene que dar no solo el salto de calidad, sino también el salto en la producción" y advierte de que "esto es absolutamente imprescindible”.Con estas palabras, la Sedef ha pedido a la industria de Defensa española, durante un desayuno informativo del Club Diálogos para la Democracia, un cambio que responda al “esfuerzo inversor” realizado por el Gobierno, “un esfuerzo que se refleja en el incremento del 25,8% del presupuesto de Defensa en 2023”.
De hecho, Brunei va a sustituir con los dos aviones que acaba de encargar al CN235-110M con el que lleva operando desde 1997.
En concreto, el Ejecutivo ha aprobado un acuerdo por el que el Ministerio de Hacienda autoriza al Ministerio de Defensa la adquisición de compromisos de gasto con cargo a ejercicios futuros para llevar a cabo la adquisición de un segundo lote del sistema integrado de enseñanza en vuelo para pilotos (Integrated Training System-ITS), el nombre con el que se conoce el PC-21 y todos los equipos de entrenamiento asociados en el Ejército del Aire.
Hitos de 2022 En su intervención, el general Salto además mencionó algunos de los hitos y avances durante este año 2022 como la aprobación de la Estrategia Espacial del Ejército del Aire que “guiará nuestra adaptación orgánica para asumir esta responsabilidad e implantar un sistema de mando y control espacial en un futuro próximo cercano”, el inicio del primer curso de vuelo básico en la Academia General del Aire con el sistema integrado de entrenamiento en el Pilatus y la consolidación de capacidades recientes como los NH90, los Predator B o los A400M que “ya están dando una operatividad y eficacia excelentes”.
El Ejército del Aire explica que en la actualidad no cuenta con la infraestructura necesaria para alojar los nuevos aviones (sistema T.24 en la denominación interna). Programa MRTT El Ejército del Aire ya opera dos A330 en la versión de transporte en el 45 Grupo de Fuerzas Aéreas, con sede en Torrejón, mientras que el tercero acaba de entrar la planta de Airbus en Getafe para su conversión a MRTT. Las dos primeras aeronaves, recibidas en noviembre de 2021 y mayo de 2022, serán transformadas a la versión de reabastecimiento en vuelo a partir de 2024.
En el caso español, a falta de confirmación oficial, se desplegará en el Cuerno de África un avión de vigilancia marítima CN235 (Delta 4), una aeronave que ya sabe lo que es patrullar las aguas de esta región. La operación Atalanta forma parte del compromiso adquirido por España, bajo bandera de la Unión Europea, en su lucha por mantener la seguridad marítima frente a las costas de Somalia y países vecinos en la región del océano Índico. Desde la entrada en vigor de la Decisión (PESC) 2020/2018, que prorroga el mandato de la operación Atalanta, se incluyen algunas tareas como la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, y el tráfico de drogas, armas y carbón vegetal que refuerzan el papel de Atalanta como factor de seguridad marítima en la zona y se basan en su éxito en la lucha contra la piratería y la protección de los barcos del WFP y otros buques vulnerables. Brecha en la patrulla marítima y C295 La baja de los P.3 Orion provocará una pérdida temporal de capacidades en patrulla marítima y, sobre todo, en guerra antisubmarina en el Ejército del Aire.
El Ejército del Aire señala que esta actualización es “necesaria para solventar la obsolescencia de sus diferentes elementos, especialmente de los sistemas de guerra electrónica que son los responsables de la detección de amenazas y de la generación de contramedidas electrónicas garantizando con ello la supervivencia de las tripulaciones y de las aeronaves”. Esta es una de las mejoras que incluye el nuevo software OFP-08E que el Ejército del Aire empezó a incorporar en la flota de F-18 en 2021, como recogió Infodefensa.com.
El vuelo, que duró 90 minutos, estuvo pilotado por una tripulación combinada de Airbus, la RAF y Rolls-Royce, y reprodujo una salida de reabastecimiento en el aire.
Otro de los especialistas implicados en la historia del MSN4, el ingeniero de pruebas de vuelo a cargo del desarrollo y certificación de la capacidad AAR en el aire del avión, tanto como cisterna como receptor, César González, explica que se trata de “nuestro caballo de batalla de reabastecimiento aéreo, ya que [el Grizzly 4] fue donde probamos las capacidades del receptor con cisternas como el A330 Voyager y el C160 Transall”.
En el caso concreto de los veteranos F-5, utilizados por el Ejército del Aire para el entrenamiento avanzado de pilotos de caza, se necesitan específicamente arrancadores para la puesta en marcha de los motores. La actual flota de arrancadores, detalla la Fuerza Aérea, tiene entre 50 y 70 años y presenta averías “difícilmente solucionables por la escasez y obsolescencia de sus repuestos”, lo que ha provocado la retirada en los últimos años de buena parte de equipos de este tipo.
El Ministerio de Hacienda en concreto ha autorizado al Ministerio de Defensa a modificar los límites para adquirir compromisos de gastos los dos próximos años, lo que permitirá a Defensa recibir la inversión necesaria. En julio, el Ejército del Aire y la Secretaría de Estado de Medio Ambiente ya pusieron en marcha el proyecto con la firma de un acuerdo interdepartamental en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.El hangar dispondrá de dos posiciones y sus elementos anexos en la Maestranza Aérea de Albacete, y permitirá mejorar las actuaciones de mantenimiento de la flota de aviones anfibios apagafuegos, así como el inicio de los trabajos de modernización de la flota de CL-215T.En la cláusula cuarta del acuerdo entre se establece que las actuaciones conjuntas del Ministerio de Transición y del Ministerio de Defensa se contemplan en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia; concretamente, en el Componente 4 Ecosistemas y Biodiversidad, Inversión 4 Gestión Forestal Sostenible.Para la financiación de estas actuaciones conjuntas, se efectuará la tramitación de los sucesivos expedientes de transferencia de crédito, detalla el Ministerio de Hacienda. En consecuencia, los compromisos de gasto serán adquiridos, detalla, por el Ministerio de Defensa con cargo a la aplicación presupuestaria Gestión forestal sostenible para los ejercicios 2023 y 2024.Modernización de diez CL-215TLas empresas Gestair Maintenance y Sirium Aerotech se hicieron a principios de octubre con un contrato de 22 millones de euros para la modernización de la flota de apagafuegos CL-215T operada por el 43 Grupo.
El INTA dispone en estos momentos de tres plataformas dedicadas a la investigación: dos C212-200, adquiridos en 1994 y operados por el Ejército del Aire y del Espacio, y un motovelero Stemme S15.
En su conjunto se podrán instalar en cualquiera de los tres aviones bien 24 camillas, o bien 12 camillas y 6 estaciones de cuidados intensivos. El avión dispone de una autonomía de más de 18 horas de vuelo y 16.000 kilómetros, lo que le dota de una gran proyección estratégica, con capacidad para llegar a cualquier parte del mundo sin necesidad de escalas. El contrato incluye el soporte asociado tal como las piezas de repuesto, los equipos de apoyo en tierra, la formación y el soporte en servicio hasta el vencimiento del acuerdo.