La mitad de los países de la OTAN ya sitúan su poder militar en torno al 2% del PIB

El intento de invasión rusa de Ucrania, que comenzó en febrero de 2022, sumada a las tensiones frente a China en la región de Asia-Pacífico, están impulsando un incremento en los gasto de defensa de la OTAN con el 2% del PIB como meta deseable. En 2014, los 28 miembros entonces de la Alianza Atlántica, se marcaron este objetivo con 2024 como horizonte (desde entonces se han sumado Montenegro y Macedonia del Norte a la organización). En 2023 ya son 11 los países los que han logrado alcanzar el objetivo del 2% (Estonia, Finlandia, Grecia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía, República Checa, Reino Unido y Estados Unidos), y otros cuatro ya lo rozan, al superar el 1,8% (Bulgaria, Francia, Montenegro y Macedonia del Norte). Apenas es poco más de un tercio de loa 30 países que componen ahora la OTAN, cuando solo queda un año para el 2024 acordado para lograrlo. Sin embargo, supone un incremento notable respecto a los años anteriores, y mucho más en relación a 2014, cuando se acordó este plan, que únicamente Estados Unidos, Grecia y Reino Unido cumplían.

En 2021, en vísperas de la guerra que ahora azota el este de Europa, solo eran seis (Estonia, Grecia, Letonia, Polonia, Reino Unido y Estados Unidos) los miembros de este club del 2% (además Croacia, Francia, Lituania y Rumanía superaban el 1,8%). Y el año pasado, 2022, el número era de siete, al sumarse Lituania, más cuatro superando el 1,8%, con la incorporación de Hungría y la República Checa (al tiempo que Rumanía descendió de forma coyuntural).

Por encima del 3%, se mantiene como una constante Estados Unidos, al que desde 2021 le acompaña Grecia y ahora también se ha sumado Polonia, que está haciendo un esfuerzo especialmente importante en incrementar su fuerza militar, con la guerra en Ucrania a sus puertas.

Más esfuerzo en equipamiento

El 3% del PIB es una cifra que se ha llegado a manejar como posible nuevo horizonte, en vista precisamente de las tensiones disparadas por la invasión rusa de Ucrania e impulsadas por la geopolítica de Asia-Pacífico, donde China aumenta su protagonismo al tiempo que se vislumbra una posible invasión de Taiwán.

La media de los 30 países alcanza ahora 1,74%, mientras que un año antes era del 1,65%.

Resulta significativo que todos los países de la OTAN dediquen ahora más del 20% de su esfuerzo en defensa en equipamiento, cuando en 2014 apenas eran seis. Esto da una idea de que el incremento de los gastos militares se focaliza en gran medida en la obtención y mantenimiento de material militar.

También resulta interesante observar que el gasto en defensa del conjunto de los países miembros de la OTAN ya alcanza los 1.100 millones de dólares, debido en gran medida al incremento experimentado por los países Europeos y Canadá, que ahora suman en conjunto 356.000 millones (el año pasado eran 329.000 millones). Es notable que el gasto en grandes equipos de defensa de estos países (todos menos EEUU) ya se acerque al 25% de media de su esfuerzo en defensa, mientras que en 2022 apenas era del 8,5%.