Ante la proliferación de drones aéreos que pueden llegar a suponer una amenaza hostil para la seguridad de los ciudadanos, el uso de los mismos con fines maliciosos, y los frentes internacionales abiertos, - incluyendo dos guerras activas-, así como el incipiente problema de los incidentes en el espacio aéreo relacionados con la colisión de aeronaves con drones, los aeropuertos están ya estudiando seriamente cuándo y cómo incorporar los sistemas antidrón a sus medidas de seguridad.
Según un reciente estudio elaborado por el Consejo Nacional de Investigaciones de Canadá del Centro de Investigación Aeroespacial, los drones de tamaño mediano y grande con capacidad de carga útil grande pueden causar daños significativos a las aeronaves, incluidos parabrisas rotos, penetración, pérdida de elementos ópticos y la necesidad de realizar aterrizajes de emergencia tras el impacto. En este sentido, Homeland Security Today registró la existencia de 92 incidentes relacionados con drones en 2020 el espacio aéreo alemán, de los cuales una tercera parte ocasionó problemas graves en las infraestructuras aeroportuarias, tales como la obligación a mantener un distanciamiento mayor entre operaciones de despegue y aterrizaje; o la inhabilitación temporal de ciertas áreas específicas. En el peor de los casos, estos incidentes podrían incluso suponer el cierre temporal de los aeropuertos, con las afecciones en términos de movilidad y costes que esta interrupción temporal de la operativa supondría.
Por todo ello, el gran reto de cara a la implantación definitiva de sistemas antidrón en una infraestructura crítica de características tan específicas como lo es un aeropuerto es: ¿Cómo actuar frente a los drones ‘enemigos’ sin derribar a los ‘amigos’ o sin interferir en el normal funcionamiento del espacio aéreo?
Target Tecnología, conscientes del gran desafío, son pioneros en España en la distribución del Enforce Air 2, fabricado por su ‘partner’ D-Fend Solutions. Se trata del único sistema antidrón en el mundo capaz de tomar el control de un dron malicioso, desconectarlo de su piloto y aterrizarlo sin daños colaterales, siguiendo una ruta segura. Una solución que recientemente adquirió el Ejército del Aire español y en la que ya confía el Papa Francisco I para garantizar su protección durante las visitas internacionales.
Esta tecnología, además, acaba de ser seleccionada para participar en el Programa de Investigación de Detección y Mitigación de UAS en Aeropuertos de la Administración Federal de Aviación (FAA) de los Estados Unidos. El sistema central de C-UAS de D-Fend Solutions, EnforceAir, se someterá a pruebas iniciales en el Aeropuerto Internacional de Atlantic City (KACY) y a una posible evaluación adicional en otros aeropuertos. Diseñado específicamente para dotar a los aeropuertos de un enfoque quirúrgico contra drones para la detección y mitigación de amenazas, el Enforce Air 2 permite a los drones cercanos autorizados continuar sus operaciones sin efectos colaterales en los sistemas de navegación o comunicaciones, daños a la infraestructura o una carga excesiva para los recursos humanos. El sistema proporciona protección y cobertura direccional de 360 grados y de largo alcance para proteger las instalaciones aeroportuarias y los corredores del espacio aéreo de despegue y aterrizaje. Esto lo convierte en el sistema antidrón más avanzado del mundo y que, de ser un éxito esta prueba piloto, podría significar toda una revolución en el espacio aéreo tal y como hoy lo conocemos.
El valor añadido de la implantación de un sistema antidrón para los servicios de seguridad aeroportuaria incluyen: detección de presencia de drones no autorizados a kilómetros de distancia, antes de que supongan una amenaza real, lo que permite tomar las medidas de prevención pertinentes; detectar y neutralizar a tiempo aquellas amenazas de drones (como posibles ataques terroristas), con cargas peligrosas, como explosivos, o proporcionar información muy valiosa como la ubicación del operador del dron no autorizado que permita a las autoridades actuar a tiempo para salvaguardar la seguridad ciudadana.
Todavía queda mucho por explorar acerca de los sistemas antidrón y sus múltiples ventajas, así como de todo el potencial del Enforce Air 2. Pero, de validarse el sistema en las pruebas piloto de la Administración Federal de los Estados Unidos en los aeropuertos, el Enforce Air2 jugará un papel fundamental en este tipo de infraestructuras críticas próximamente.