La Secretaría de Defensa Nacional de México planea comprar un nuevo avión presidencial

(Infodefensa.com) A. López, San Salvador – La Secretaría de la Defensa Nacional de México (Sedena) planea sustituir el avión presidencial en el corto plazo por una aeronave mucho más moderna y con capacidad de vuelo de mayor alcance y autonomía, para sustituir el actual TP-01, un Boeing 757 de casi 25 años de antiguedad, según han publicado diversos medios mexicanos.

De hecho, el Senado de la República ya habría aprobado la compra del equipo, según plasmó el periódico Excelsior. Se habla del nuevo Boeing 787 Dreamliner, como la opción de transporte aéreo para el presidente de México, cuya precio asciende a 190 millones de dólares, pero la Sedena pudiera estar negociando un valor entre 140 y 160 millones de dólares.

Según Excelsior, el Gobierno mexicano ha tenido acercamiento con representantes de la compañía Boeing para la compra de un avión que sustituya  a la actual nave presidencial, cuyo modelo es un 757 de la misma empresa estadunidense, el cual ya estaría elevando mucho sus costos de operación por lo antiguo del avión y los legisladores expresaron que no hay que escatimar recursos en pro de la seguridad del mandatario. El Presidente Juárez, matrícula XC-UJM, con designador de vuelo TP-01, recibió un servicio completo de mantenimiento en el 2007, por un monto de inversión de casi cinco millones de dólares. Permaneció en tierra por casi cinco meses.

Fuentes de la compañía cercanas a las negociaciones dieron a conocer, precisamente, que el modelo que más se acerca a las necesidades de las autoridades mexicanas es el 787. Representantes de Boeing dijeron a Excelsior que el avión está disponible y puede ser entregado inmediatamente, ya que es uno de los primeros que construyó la compañía estadunidense para sus vuelos de prueba y certificación, de ahí que se negocie el precio de la aeronave, dado que no ya no es un avión del todo nuevo.

Dicha nave es semejante al que la empresa trajo de muestra en marzo pasado al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), luego de anunciar que Aeroméxico les había comprado siete de estos aparatos para ser entregados entre 2012 y 2015. Los involucrados en la negociación afirman que fue durante esa visita cuando personal de la Sedena y del Estado Mayor Presidencial (EMP) conocieron y analizaron el 787 Dreamliner por dentro y por fuera, y dijeron estar convencidos que era lo que buscaban. Las fuentes relatan que a dicha demostración acudieron mandos militares y funcionarios del gobierno mexicano, todos vestidos de civil.

El Dreamliner posee dos variantes. El 787-8 tiene la capacidad de transportar entre 210 y 250 pasajeros en rutas de entre 14.000 y 15.200 kilómetros, mientras el 787-9 puede llevar entre 250 y 290 pasajeros en rutas de entre 14.800 y 15.750 kilómetros.

El avión actual, un 757-225, que fue adquirido en 1987 por la administración de Miguel de la Madrid, puede transportar hasta 66 pasajeros y no puede realizar vuelos de más de doce horas. Ese modelo tenía un costo en esa época de unos 65 millones de dólares, pero México habría recibido un precio especial por sobre existencia de ese equipo.

Foto: Boeing.