Indra entra de lleno con la compra de Aertec DAS (Defense & Aerial Systems) en el negocio de los drones militares, un mercado en expansión con un enorme potencial, por la guerra en Ucrania principalmente, considerado además estratégico en los nuevos planes de la Unión Europea.
La operación, que será anunciada oficialmente este martes, refuerza la nueva división Indra Weapons & Ammunition con la familia de sistemas aéreos no tripulados Tarsis y las capacidades de producción industrial y de ingeniería de Aertec DAS.
Con esta compra, Indra apuesta por convertirse en un referente en España en el diseño, desarrollo y producción de drones de tamaño medio, en un momento de gran demanda de este tipo de soluciones en el escenario internacional. La multinacional tecnológica española también quiere dar el salto a Europa donde aparecen nuevas oportunidades de negocio en el sector dentro del programa ReArm Europe, impulsado por la Unión Europa, que identifica los drones como una de las capacidades críticas a potenciar.
La nueva estrategia en el sector de los drones pasa por combinar la experiencia de Indra en grandes programas internacionales con la considerable capacidad industrial de producción de drones y también de ingeniería de Aertec DAS, con diseño y tecnología propios para aplicaciones de observación y vigilancia, y reducido riesgo tecnológico, así como funcionalidades diferenciales.
Indra busca aprovechar estas sinergias para acelerar el crecimiento y fortalecer la posición de la industria española en este mercado, al tiempo que persigue potenciar el centro de Aertec DAS en Sevilla, con 46 profesionales, y crear una polo tecnológico de drones en torno a estas instalaciones, donde está la línea de ensamblaje de drones.
Familia de drones Tarsis
La compañía que dirige Ángel Escribano integrará Aertec DAS en Indra Weapons & Ammunition, enfocada en el desarrollo de sistemas antidrón, guiado de precisión, plataformas de energía dirigida y vehículos no tripulados.
Aertec DAS está especializada en sistemas aéreos no tripulados tácticos de la categoría Clase I, de hasta 150 kg, operativos ya en las Fuerzas Armadas españolas. El producto estrella es el dron Tarsis, con dos versiones principales. Por un lado, Tarsis Istar (Inteligencia, Vigilancia, Localización de Objetivos y Reconocimiento), que ofrece una gran capacidad de integración de carga útil hasta 15 kg y amplia autonomía de vuelo hasta 12 horas, características que permiten múltiples configuraciones y adaptabilidad a entornos operativos muy exigentes.
Y, por otro lado, Tarsis W, con una carga útil de hasta 30 kg y capacidad para integrar micromisiles Fox de 3 kg, producto de la misma división, que se encuentran actualmente en fase de desarrollo en colaboración con el Ministerio de Defensa.
Si hay un segmento en Defensa que crecerá en los próximos años, ese será el de los sistemas aéreos no tripulados. El negocio de los UAS en Defensa está en plena expansión, a raíz de la invasión rusa de Ucrania y de los recientes conflictos en Oriente Próximo. Y es que el empleo de los drones en el campo de batalla moderno pone de manifiesto su gran versatilidad para intervenir de forma eficaz en un amplio abanico de misiones a un coste relativamente bajo sin la necesidad además, en muchas ocasiones, de exponer al combatiente.