10/03/2008 - A las 18,09 horas de hoy, día 10 de Marzo de 2008, coincidiendo con la pleamar más viva del año, era botado en el astillero de Navantia Ferrol el buque LHD Juan Carlos I. En el solemne acto, Su Majestad la Reina de España actuaba como Madrina de la que, a partir de su entrega en diciembre próximo, será la unidad más grande de la Armada española en toda su historia.
El Rey Don Juan Carlos y la Reina Doña Sofía, acompañados por los Príncipes de Asturias, llegaban al astillero unos minutos antes. A pie de grada fueron cumplimentados por el presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño, el ministro de Defensa en funciones, José Antonio Alonso, y los presidentes de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Enrique Martínez Robles, y el de Navantia, Juan Pedro Gómez Jaén, así como el Jefe del Estado Mayor de la Armada, Almirante General Sebastián Zaragoza.
Desde media hora antes, en un día nublado y frío, abarrotaban las gradas cientos de invitados al histórico acto. Entre los asistentes figuraban el embajador de Australia, Noel Campbell, numerosos representantes de las marinas y naciones con las que Navantia tiene una especial relación como las de Noruega y Sudáfrica, así como directivos de los más de 100 subcontratistas del programa.
Tras abordar la Familia Real y sus acompañantes la tribuna de autoridades, la secuencia de botadura se iniciaba a las 18,02 horas con la preceptiva indicación de "barco listo y despejado para botadura; entrega de llaves para retirada de candados; entrega de candados retirados y bendición del buque".
A la hora exacta prevista, la Reina Sofía golpeaba con un pequeño martillo el mecanismo que cortaba la cinta de la botella de cava lanzándola contra el casco del buque. Majestuosamente, los 230 metros de eslora de la gigantesca unidad comenzaban a deslizarse por la grada a los sones del Himno Nacional, interpretado por una banda de música de Infantería de Marina.
Con sus 18.000 toneladas de peso en el momento de la botadura y una altura equivalente a una casa de 16 plantas, el LHD Juan Carlos I entraba en las aguas de la ría de Ferrol levantando una espectacular ola, hasta quedar estabilizado unos momentos después por los remolcadores.
Tras unos minutos, la Familia Real se encaminaba a la dirección del astillero, para firmar en el Libro de Honor. La Madrina recibía, de manos del Director del Astillero de Fene-Ferrol, Angel Recamán, como presente y recuerdo el mazo con el que la Reina había iniciado la botadura. Por su parte, el Presidente de SEPI ofrecía una maqueta del buque de su nombre a Su Majestad el Rey Don Juan Carlos.
La histórica jornada se completaba con la inauguración por los Reyes de España del nuevo Museo de la Construcción Naval, situado en el inmediato Arsenal; esta exposición permanente, primera en su género en España, ha sido realizada en colaboración entre la Armada, la industria naval y las administraciones locales y autonómicas.