Los Mossos recibirán tres barcos este año y buscan asumir funciones de la Guardia Civil

Los Mossos d’Escuadra dispondrán antes de final de año de tres nuevas embarcaciones en servicio en su Policía Marítima con las que aspiran a aumentar sus competencias marítimas y asumir las funciones en el mar territorial que están asignadas actualmente al Servicio Marítimo de la Guardia Civil (Semar).

El pasado 28 de agosto, el primero de estos barcos, el Cap de Creus, fue botado en el Port de la Selva (Girona). Se trata de una embarcación de monocasco rígido con un casco ligero y resistente, tiene unas dimensiones de 12,83 m de eslora y 3,53 m de manga, con un peso de 7,8 toneladas. Dispone de cabina cerrada para seis tripulantes, aunque tiene capacidad para más pasajeros. Cuenta con dos motores fuera borda de gran potencia que le permiten alcanzar una alta velocidad crucero y una rápida respuesta.

En las tres embarcaciones, la Generalitat ha invertido 1,5 millones de euros. La Cap de Creus tendrá su base en el puerto de Palamós y el resto de embarcaciones se destinarán a los puertos de Vilanova y la Geltrú y L'Ametlla de Mar.

Los nuevos barcos incorporan equipamiento de última tecnología en navegación, conectividad y capacidad de captación y transmisión de imágenes. Cada una incorpora además dron específico para operar en el medio acuático y de un ROV para facilitar las tareas de inspección en profundidad.

Conflicto de competencias con la Guardia Civil

Según el propio cuerpo policial catalán, con la incorporación de las tres embarcaciones antes de final de año, la Policía Marítima tendrá “los medios necesarios para asumir todas las funciones de policía integral y ordinaria también en el mar”.

El Departamento de Interior de la Generalitat insiste en este punto. “La incorporación de las nuevas embarcaciones posibilita disponer de los medios necesarios para asumir todas las funciones de policía integral y ordinaria en todo el territorio de Cataluña, incluido el mar territorial, así como apoyar en el medio marítimo y acuático a cualquiera de las otras unidades del cuerpo de Mossos en sus tareas”, asegura.

Estos planes podrían desembocar en un conflicto de competencias con la Guardia Civil. Es importante recordar que las policías autonómicas pueden llevar a cabo misiones de salvamento marítimo en la zona litoral, mientras que el Instituto Armado es responsable de garantizar la seguridad en todo el mar territorial español. El pasado mes de junio, Salvamento Marítimo suscribió un acuerdo con los Mossos d’Escuadra para capacitar a sus agentes en competencias marítimas.

La Policía Marítima de los Mossos inició su despliegue en verano de 2020 para dar respuesta, señala la Generalitat, “a las funciones policiales en el ámbito marítimo como policía integral en todo el territorio catalán con vocación de alcanzar competencias plenas en la investigación de delitos, en seguridad ciudadana y en el orden público, así como de policía administrativa”.

Las nuevas embarcaciones se sumarán a los dos barcos que ya han estado ofreciendo servicio los últimos meses: la Neptuno y la Thalassa. La primera tiene siete metros de eslora y está motorizada con dos motores de 200cv y la segunda es una patrullera semirrígida cedida judicialmente de 12 metros de eslora y con cuatro motores de 300CV. Desde el mes de mayo han hecho más de 600 horas en patrullas marítimas.