Control civil, FFAA, compras y carrera militar: las propuestas de Kast y Boric para Chile

Los candidatos José Antonio Kast del Frente Social Cristiano (FSC) y Gabriel Boric de Apruebo Dignidad (AD) pasaron a la segunda vuelta de la elección presidencial de Chile tras obtener la primera y segunda mayoría en el proceso que se celebró este domingo 21 de noviembre.

Kast postula en su programa de gobierno que el objetivo de la Defensa Nacional es proteger a Chile de amenazas armadas constituyendo un respaldo a la política exterior y que solo ante casos justificados y como medida expecional, estas instituciones podrán colaborar en materias de seguridad pública a través de normativas y protocolos que otorguen certezas para reestablecer el orden público.

Para lograr este propósito, la tarea del Ministerio de Defensa será formular y dirigir la política del sector con un Plan Estratégico Nacional mientras que la planificación y coordinación conjunta de las Fuerzas Armadas se realizará a través del Estado Mayor Conjunto.

Gabriel Boric plantea una transformación institucional de la Defensa Nacional orientada a aumentar el control para garantizar la probidad y transparencia de las Fuerzas Armadas, fortalecer la institucionalidad civil de la defensa para la gestión del cambio y construir una cultura institucional que valore la diversidad y promueva el respeto de los derechos humanos.

Su programa considera incrementar los mecanismos de control democrático en el Congreso y la Contraloría en materias políticas y administrativas, la elaboración participativa de una Política de Defensa Nacional y aumentar las capacidades de dirección, mando y control de las autoridades civiles de la Defensa, institucionalizando el proceso de planificación por capacidades de carácter conjunto y una carrera funcionaria adecuada para su ejecución.

Defensa, Fuerzas Armadas y Estado Mayor Conjunto

El candidato del FSC establece en su plan la necesidad de continuar con el proceso de potenciamiento de las funciones de dirección y control financiero, económico y logístico del Ministerio de Defensa, y que los funcionarios de la cartera tengan una carrera estructurada equivalente a la del escalafón de oficiales de las Fuerzas Armadas. 

Kast postula que que el criterio para definir cuanta Defensa es necesaria será la suficiencia y estará dada por la estimación de los niveles de capacidad militar requeridos para producir disuasión convencional en el contexto regional. A su vez, el Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas deberán preparar y mantener fuerzas de reserva capaces de duplicar sus efectivos efectivos desplegables ante una emergencia nacional o internacional.

El cargo del jefe del Estado Mayor Conjunto deberá ascender y alcanzar el nivel jerárquico de los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas para mejorar la función racionalizadora pasando a retiro al final del mandato. Las instituciones continuarán siendo administradas, conducidas y entrenadas por sus respectivos comandantes en jefe, debiendo preparar componentes para actuar ante situaciones de emergencia y catástrofes naturales.

El programa de AD, por su parte, considera a la Defensa Nacional y a las Fuerzas Armadas como una herramienta activa y eficaz, que sin sustituir los roles que le corresponden al poder civil, actúen siempre dentro de sus competencias para garantizar el proceso de cambio político libre de interferencias extranjeras y contribuyendo a consolidar la zona de paz sudamericana.

En cuanto al cargo del jefe del Estado Mayor Conjunto, propone una jerarquía y autoridad superior a los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas, asumiendo también el mando superior y conducción estratégica de estas instituciones en tiempos de paz para fortalecer y desarrollar la doctrina conjunta de la fuerza en todos los niveles.

Financimiento de compras militares e industria de Defensa

Kast establece que la asignación de recursos para las compras militares será decisión presidencial con asesoría del Ministerio de Defensa y del Estado Mayor Conjunto, mientras que la Subsecretaría de Defensa planificará la adquisición de eistemas de armas mediante un sistema de desarrrollo de fuerzas orientadas a satisfacer las necesidades estratégicas.

En cuanto a Fábricas y Maestranzas del Ejército (Famae), Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar) y la Empresa Nacional de Aeronáutica (Enaer), Kast postula su continuidad por ser entidades estratégicas para la seguridad nacional.

Boric plantea fortalecer el control civil sobre el financimiento y ejecución presupuestaria de las Fuerzas Armadas otorgando mayores atribuciones de auditoría, supervisión y fiscalización al Ministerio de Defensa, al Congreso Nacional y la Contraloría General de la República.

El candidato apuesta por crear una agencia civil de compras y adquisiciones militares eliminando los pisos mínimos contemplados en el Fondo Plurianual de Capacidades Estratégicas y en el Fondo de Contingencia Estratégica establecidos en la Ley 21.174 que reemplazó a la Ley Reservada del Cobre.

Carrera y educación militar

El programa de Kast contempla flexibilizar los sistemas y condiciones de ingreso, permanencia y egreso del sistema, estableciendo carreras parciales y asignando un porcentaje creciente de personal con carreras permanentes. El ingreso será centralizada y por instituciones.

Se adecuará la estructura de remuneraciones del personal de planta a las condiciones del mercado y se modificará la Ley de Plazas que es insuficiente para los requerimientos del cuadro permanente de las Fuerzas Armadas.

En cuanto al sistema previsional, habrá un aumento sustantivo de los aportes que irán a cuentas individuales junto a un seguro por retiro involuntario anticipado el que se hará efectivo al momento de jubilar manteniendo el actual bono de indemnización de retiro. Este nuevo sistema elimina la disposición de no reconocer pensión de retiro antes de los 20 años de carrera militar.

El programa de Boric considera terminar con el secreto de las juntas de selección y apelación, y avanzar en las reformas pendientes en materia de justicia militar, restringiendo esta jurisdicción sólo a delitos estrictamente de carácter militar cometidos por militares.

El documento de AD establece que los proyectos educativos institucionales y sus respectivos planes curriculares deberán ser autorizados por el Ministerio de Defensa en consulta con el Ministerio de Educación y deberán incorporar una perspectiva de género y de Derechos Humanos dando forma a un perfil de egreso básico y común promoviendo una cultura de Derechos Humanos en toda la carrera.

El Ministerio de Defensa deberá, según este plan, fiscalizar y validar los procesos de selección en las escuelas matrices y se revisarán las condiciones de acceso y financiamiento en la educación militar con el propósito de eliminar las exclusiones derivadas de las brechas socioeconómicas entre escalafones, y se fortalecerán las políticas de inclusión desde una perspectiva de género, de diversidad sexual, étnica y socioeconómica tanto en las instituciones como en la cartera.

Foto 1: Facebook José Antonio Kast. Foto 2: Facebook Gabriel Boric. Fotos 3 y 6: Ejército de Chile. Fotos 4 y 7: Armada de Chile. Foto 5: Fuerza Aérea de Chile