​Indra refuerza su posición en defensa con la entrada de Sapa en el consejo

La junta general de accionistas de Indra ha aprobado este jueves el nombramiento de Jokin Aperribay como consejero dominical en representación de la empresa de defensa Sapa, con casi el 8% del capital de la multinacional tecnológica. Su designación salió adelante con el 53,1% de los votos y el apoyo de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y el fondo Amber.

En la reunión también se ha producido el cese de cuatro consejeros –Alberto Terol, Carmen Aquerreta, Enrique de Leyva y Ana de Pro-. Tampoco continuará Isabel Torremocha tras no alcanzar la mayoría suficiente para continuar en el consejo. El cese de estos consejeros entró a última hora en el orden del día a propuesta del fondo Amber, que acaba de entrar en Indra con algo más del 4%.

El órgano además ha ratificado la reelección de Luis Abril con la condición de consejero ejecutivo, de Francisco Javier García Sanz como consejero independiente, y de Antonio Cuevas y Miguel Sebastián en representación de la SEPI, máximo accionista de la compañía. Asimismo, se han autorizado otros puntos como las cuentas y el informe de gestión; el informe de sostenibilidad; la propuesta aplicación del resultado, junto con la reelección de Deloitte como auditor de la compañía.

Con la entrada de Sapa, empresa guipuzcoana especializada en transmisiones para vehículos militares, Indra refuerza su posición en el área de defensa y gana un aliado en el consejo de cara a la previsible entrada de la multinacional tecnológica en ITP Aero. En esta última, ya está Sapa de la mano de Bain Capital. El fondo estadounidense controla el 70% del fabricante de motores y turbinas, y ha ampliado el plazo para la entrada de socios españoles, entre los que podría estar al final Indra, hasta llegar al 30% restante.

Por otra parte, la SEPI aumenta su peso en la empresa que preside Marc Murtra, tras la salida de hasta cuatro consejeros independientes. El holding público que ya controla más del 24% del capital pronto pasará a tener un tercer consejero. El elegido es Juan Moscoso, economista y profesor vinculado al PSOE. Su nombramiento no estaba en el orden del día, pero la previsión es que se produzca en las próximas semanas.

La reestructuración de junta allana el camino para incrementar la posición de Indra en el sector de la defensa en un momento marcado por el compromiso del Gobierno español de incrementar la inversión tras la invasión rusa de Ucrania. Este es precisamente uno de los objetivos de la SEPI, con Sapa y Amber como aliados.

El Gobierno autorizó en febrero de este año al holding público a la compra de acciones de Indra hasta alcanzar un máximo del 28% de su capital social. Este movimiento persigue, según explicó entonces Hacienda, ministerio del que depende la SEPI, “la participación del Estado como accionista de referencia en una compañía estratégica para el país, especialmente en el ámbito de la seguridad y la defensa”, además de dotar a Indra de “una estabilidad accionarial y un apoyo eficaz para que pueda llevar a cabo con éxito los compromisos asumidos”.