La central nuclear de Zaporiyia sufre diversos ataques en los últimos días, de los que Rusia y Ucrania se culpan mutuamente. El Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) informa de que se produce una interrupción en las conexiones eléctricas de la central debido a un incendio.
Respecto al ataque ruso en la estación ferroviaria de Chapline, Ucrania afirma que murieron 25 civiles, pero Rusia asegura que murieron “más de 200 militares”. En cuanto al avance de la ofesiva, Rusia ralentiza sus ataques debido a la inoperancia de su ejército y a la resistencia ucraniana, explica la inteligencia británica.