El Ejército del Aire encarga 20 tractores remolcadores a Einsa y comprará otros 80 por 6,4 millones

El Ejército del Aire y del Espacio ha adjudicado a la empresa Einsa cuatro contratos por un valor conjunto superior al millón de euros para el suministro de un lote de 22 tractores ligeros de 3.000 libras de tracción. Los contratos derivan de un acuerdo marco firmado en 2018 con esta compañía, que vence ahora, para renovar la flota de estos vehículos utilizados para mover las aeronaves en las bases aéreas. 

Este pedido coincide con el lanzamiento de otro acuerdo marco con un presupuesto de 6,4 millones para la adquisición también de tractores remolcadores, en este caso, medios, de 6.000 libras de tracción a la barra a lo largo de los próximos cuatro años. El nuevo contrato marco busca dar continuidad a la sustitución de estos medios.  

Estos equipos tienen la función de remolcar, posicionar y empujar aeronaves y equipos auxiliares de apoyo en bases aéreas, aeropuertos y muelles o zonas de carga del Ejército del Aire. El contrato contempla la compra de dos modelos de tractores: de motorización diésel y de motorización eléctrica. La previsión es adquirir 20 tractores al año -diez de cada versión- entre 2023 y 2026.  

La entidad responsable de la adjudicación es la Dirección de Adquisiciones del Mando de Apoyo Logístico (Malog) mediante procedimiento abierto y tramitación ordinaria. Las compañías interesadas tienen hasta el 20 de enero para obtener los pliegos y hasta el 30 de este mismo mes para presentar las ofertas. 

El valor estimado del contrato asciende a los 9,6 millones de euros –IVA excluido-, al incluir una posible prórroga de un año de 3,2 millones. El Ejército del Aire y del Espacio explica que “para las tareas de remolcado, posicionamiento y empuje de aeronaves de ala fija y rotatoria ligeras de hasta 60 toneladas en bases aéreas, se hace imprescindible el uso de equipos remolcadores apropiados para este fin”. 

Flota anticuada  

La Fuerza Aérea persigue renovar la flota de estos vehículos. “Debido a la elevada edad de la flota, con un 37% de la flota superando los 20 años en servicio, y unido a su amplia utilización, se vienen produciendo numerosas bajas de equipos en la flota, por obsolescencia (por encima de 15 años se encuentran importantes dificultades para encontrar repuestos) y por averías de reparación antieconómica, provocando graves interferencias en la operación de las aeronaves en las bases”, detalla.  

Asimismo, advierte que “el uso de remolcadores no adecuados en su capacidad de arrastre al peso de la aeronave originan daños tanto al propio remolcador como a elementos de las barras de arrastre o trenes de aterrizaje de las aeronaves, por tirones en el intento de remolcar o por incapacidad de frenar el conjunto tractor-aeronave. Por ello, con el fin de evitar costosos y peligrosos incidentes o accidentes, es fundamental equipar a las flotas de los equipos adecuados”.