El anuncio por parte del Gobierno de la revocación de las licencias del misil contracarro Spike LR2, un contrato adjudicado a finales de 2023 a la empresa Pap Tecnos, filial en España de la israelí Rafael, fabricante del sistema, por 287,5 millones de euros, no supone, sin embargo, la cancelación del programa, que seguirá en pie pero sin tecnología de dicho país.
El sistema Spike LR2 es un misil principalmente contracarro de precisión con dos cabezas de guerra en tándem, activadas de forma secuencial. Puede penetrar 950 milímetros en sistemas de blindaje reactivo (ERA) y lograr capacidades de destrucción excepcionalmente altas. El alcance puede superar los 5 km y dispone de dos modos de operación: dispara y olvida y dispara, observa y actualiza. Tiene un peso de 27 kg, incluido tubo lanzador con misil, puesto de tiro, trípode y batería.
A pesar de que esta decisión retrasará muy probablemente los plazos del programa, se abre ahora la posibilidad de que sea la industria de nuestro país la que tome el relevo al proyecto a través de un consorcio español que llevaría el peso del proyecto, en linea con la política de industria nacional, más allá de que fuese necesario incorporar tecnología extranjera para determinados procesos.
Una de las iniciativas ya en marcha en este sentido es el proyecto bautizado como SLGM (Munición Guiada Disparable desde el Hombro), cuyo objetivo es el desarrollo de un demostrador tecnológico de munición guiada con un alcance de hasta dos kilómetros. El programa está liderado por la empresa española Instalaza, en colaboración con EM&E, y financiado a través de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) dentro del proyecto Coincidente.
El programa, que se encontraría ya en una segunda fase muy avanzada, plantea un sistema que será una evolución del actual lanzacohetes Alcotán 100 de Instalaza con el sistema de guiado Salk de EM&E. El objetivo es obtener una munición con un peso inferior a 15 kg, con una alta modularidad para futuras mejoras e integraciones con otras cabezas de guerra o sistemas de combate, un alcance de hasta 2.000 metros y un buen balance entre coste, prestaciones y efectos. Además, podría, igual que el Spike LR2, ser lanzado desde el hombre o desde un vehículo o un helicóptero como el Tigre del Ejército de Tierra.
Los principales subsistemas serán los siguientes: designador (no forma parte del proyecto de desarrollo), unidad de disparo, sistema de guiado, cabeza de combate y estructura del proyectil, sistema de propulsión y tubo lanzador.
El sistema de propulsión es de dos etapas: la primera sería un motor cohete ‘softlaunch’ y la segunda un motor de aceleración en vuelo, motor cohete. Los motores cohetes de permiten una baja firma visual para reducir la exposición del tirador.
La cabeza de combate, por su parte, está basada en la del C90 CR con un efecto antiblindaje de 480 mm, para batir cualquier blindado ligero y medio y algunos de los carros de combate principales actuales, siempre que no lleven sistemas de protección adicionales. Instalaza también contempla la integración de otro tipo de cabezas en un futuro como pueden ser cabezas de doble efecto (antiblindaje y fragmentación) u otras cabezas de mayores prestaciones.
El tubo lanzador será una adaptación del sistema Alcotán 100 en servicio. Un sistema desechable de un solo uso diseñado con resina armada con fibra de carbono con un sistema de fabricación bobinar.
Sistema de guiado
Escribano lidera la parte de guiado y navegación. La empresa proporciona el kit Salk que combina guiado inercial, guiado terminal (láser) y sistema de control y actuación (CAS). El guiado terminal requiere de designación externa del objetivo. Este kit permitirá llegar a entre los 1,5 y dos kilómetros, así como corregir la trayectoria lateral para objetivos en movimientos. También podrá operar con o sin designación láser.
La idea al final es ofrecer un sistema con un menor coste que un misil que sea eficaz en el rango de entre los 600 y los 2.000 metros donde se producen en la actualidad el grueso de los enfrentamientos en combate.
Sistemas de Misiles de España (SMS)
Otro actor que podría jugar un importante papel en esta labor de abanderar un consorcio español sería la compañía Sistemas de Misiles de España (SMS), una sociedad española participada por Instalaza, Sener Aeroespacial, EM&E y GMV, que nace en 2021 con el objetivo de consolidar las capacidades y activos relevantes existentes en el sector de los sistemas de misiles y otras municiones guiadas de altas prestaciones.
Actualmente trabaja en diversos proyectos, como una propuesta para la defensa de punto, el Saeta (Sistema de Armas Español Táctico Antiaéreo), su participación en los programas de modernización y mantenimiento de los sistemas antiaéreos legacy del Ejército de Tierra, como Patriot o Nasams, o el proyecto Hydef (European Hypersonic Defence Interceptor), la principal iniciativa europea destinada a aumentar las capacidades de defensa antiaérea frente a amenazas hipersónicas.