La Universidad de Cádiz diseña un sistema para vigilar la actividad volcánica en Nicaragua

14/10/2010 (Infodefensa.com) Managua.- Expertos de la Universidad de Cádiz (UCA) trabajan actualmente en el diseño de un sistema de vigilancia de la actividad volcánica en la isla nicaragüense de Ometepe, una zona con un alto riesgo sísmico, donde se sitúa Concepción, uno de los volcanes más activos del país.

La primera campaña de este proyecto -informa Europa Press- tiene una duración prevista de tres años y consiste en la creación de un marco de referencia espacial para evaluar el parámetro de deformación de la superficie del volcán. Esta red permitirá que, a partir de observaciones sucesivas, se establezca un modelo matemático que represente el comportamiento geodinámico del volcán, construyendo los mapas correspondientes con ayuda de imágenes satelitales.

El proyecto, puesto en marcha por el Laboratorio de Astronomía, Geodesia y Cartografía del Departamento de Matemáticas de la UCA, ha tomado como referencia las observaciones del satélite GNSS (Sistema de Satélite de Navegación Global) - GPS, ya que gracias a las características del mismo, se pueden obtener modelos de deformación muy precisos.

“Hasta hace relativamente poco tiempo, establecíamos un modelo de deformación aunque éste no era en tiempo real, ya que los datos que nos llegaban necesitaban ser tratados a posteriori para conseguir precisión milimétrica”, afirma el responsable del proyecto, Manuel Berrocoso. “No obstante –añade el profesor- desde hace un año aproximadamente, hemos encontrado la forma de sacar un sistema de vigilancia volcánica a tiempo real”.

Con el GPS y una nueva aplicación (el inclinómetro espacial), creada por este grupo de investigadores a partir del diseño de una red geodésica, se puede obtener un modelo de deformación suficiente para una vigilancia efectiva en tiempo real en zonas volcánicas. "Ya hemos montado varios puntos de observación alrededor del volcán Concepción y vamos a comenzar a obtener información sobre dos parámetros: la sísmica y la deformación", explica Berrocoso.

Hay que tener en cuenta que además de la actividad volcánica de la zona, existe el problema del deslizamiento del suelo, una realidad que genera importantes catástrofes al arrasar pueblos enteros. "Los deslizamientos se van a producir con mayor probabilidad en los flancos más débiles del volcán, precisamente donde más deformación va a ver, por lo que esta forma de vigilancia puede avisar de este hecho", matiza el profesor.

En estos momentos, los investigadores de la UCA que han participado en esta primera campaña de campo, Manuel Berrocoso y Amós de Gil, tratan de obtener un modelo de deformación inicial que sirva de referente para poder ejecutar la vigilancia que, a su vez, de lugar a la elaboración de protocolos de evacuación para la población que habita en esta zona: más de 37.000 personas.

El Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER), proporciona el apoyo logístico en la zona. También participa en este proyecto el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).