Uruguay refuerza su Guardia Republicana con más de 200 vehículos y 150 fusiles

En declaraciones a medios locales, el director nacional de la Guardia Republicana, Comisario Mayor Alfredo Clavijo, informó que la fuerza policial ha recibido 98 vehículos nuevos, incluyendo 15 camionetas blindadas marca Chery, 60 motos Honda XRE y 23 camionetas Nissan para ser destinados a distintas áreas del país, incluyendo Montevideo, Rocha, Salto y Canelones. A estas adquisiciones se le sumaran en agosto del presente año diez furgones Nissan H1, seis ómnibus, tres camiones y 150 fusiles M4.

Las incorporaciones de material se agregan a los 450 nuevos efectivos que sumó la fuerza, totalizando 1.900 elementos a la fecha. La meta final es alcanzar un despliegue nacional, continuo y efectivo para intentar mitigar la ola de delitos violentos que asola al país. La Guardia Republicana, creada a partir de las antiguas Guardias Metropolitana (Infantería) y Coraceros (Caballería) de la policía uruguaya, mantiene una estructura paramilitar dentro de una fuerza policial civil.

En ella, actualmente, se concentran todas las fuerzas especiales, de choque, negociación y funciones paramilitares de la policía nacional. Ha recibido todo tipo de armamento, inclusive fusiles de asalto, de francotirador calibre .50 y blindados de varios modelos. Sin embargo, la delincuencia continúa avanzando sin detenerse, batiendo récords de homicidios, rapiñas y delitos violentos en todo el país.

Recientemente se introdujeron cambios al Código del Proceso Penal que en teoría iban a subsanar muchos de los inconvenientes que se daban con delincuentes reincidentes y delitos graves, pero sin embargo fallas en la elaboración y ejecución del proyecto terminaron generando una gran disconformidad en la población al ver que, en muchos casos, el nuevo sistema permitía que los delincuentes lograran penas alternativas a la cárcel. Mientras el gobierno intenta paliar la crisis en seguridad y realizar cambios al proceso penal, la población se siente indefensa ante la reinante inseguridad y no se ve una salida clara para mejorar la situación.