Canadá recibe el avión de transporte C295 de Airbus número 200

El séptimo avión del pedido de 16 C295 para la Real Fuerza Aérea de Canadá (RCAF, por sus siglas en inglés) ya está en manos del cliente. Con esta entrega el fabricante, Airbus, completa el suministro de 200 aeronaves de este modelo ensamblado en las instalaciones que la empresa tiene en Sevilla (España). Está previsto que el aparato vuele en los próximos días hacia su destino definitivo en la base que la RCAF tiene en Comox, en la Columbia Británica, desde donde opera el Ala 19 canadiense.

El C295W ganó en 2016 el concurso FWSAR (siglas en inglés de búsqueda y rescate de ala fija), en el que compitió contra el modelo italiano C27J Spartan. El acuerdo incluyó, entre otros, cinco años de mantenimiento y apoyo durante el servicio de los aparatos y la construcción de un nuevo centro de adiestramiento en Comox. Todo ello se valoró en 2.400 millones de dólares canadienses, algo más de 1.600 millones de euros al cambio actual.

El avión táctico C295, al que su fabricante califica de “altamente versátil y eficiente”, acumula pedidos de 34 operadores militares y civiles de todo el mundo, desde Canadá y Egipto hasta España e Indonesia.

El acto de entrega el pasado viernes de la unidad número 200 contó con la presencia del presidente de Airbus España, Alberto Gutiérrez, el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, y el agregado militar de la embajada de Canadá.

Durante el acto, Gutiérrez destacó que las instalaciones sevillanas de San Pablo, donde se completa el ensamblaje de los aviones C295 y A400M, “es un referente en Europa, una de las pocas plantas que albergan una línea de montaje final de aviones”. El presidente de Airbus España dio su “más sincera enhorabuena a todos los equipos de la compañía que participan en este programa y que han hecho del C295 el líder mundial en el segmento del transporte táctico militar. El éxito de alcanzar las 200 entregas os pertenece por completo", concluyó.

Mejorado

Los nuevos C295 canadienses sustituirán a la actual flota de aviones CC115 Buffalo y CC130 Hercules, que han servido al país durante los últimos 20 y 40 años, respectivamente. Estos viejos aviones continuarán operando unos años más para asegurar la capacidad de búsqueda y rescate mientras se van entregando los modernos C295W. Si las previsiones se cumplen, el último de los 16 C295W encargado por la Real Fuerza Aérea Canadiense llegará al cliente en el año 2022.

El C295 es un avión de usos múltiples lanzado en 2001 como versión evolucionada del CN235. El aparato se puede configurar para su uso en distintos cometidos, como misiones humanitarias, transporte en general, operaciones de despliegue de fuerzas de intervención rápida, vigilancia marítima, guerra antisubmarina, medio de alerta temprana en el aire, inteligencia de señales, apoyo aéreo cercano y en distintas tareas de seguridad del territorio.

El avión, de casi 25 metros de envergadura y más de 23 toneladas de peso máximo al despegue, está preparado para transportar a 71 paracaidistas en su bodega de 12,7 metros de longitud o, entre otras opciones, cinco pallets grandes o bien diez pequeños. Su velocidad máxima de crucero es de 260 nudos (480 kilómetros por hora).

En los últimos años el constructor ha ido añadido una serie de mejoras de capacidades a este avión que le han permitido incrementar su rendimiento general. Además se han desarrollado nuevas configuraciones para su uso como cañonero, aeronave de control y alerta temprana (AEWC) o como sistema aéreo de vigilancia y reconocimiento, entre otros. También ha sido diseñada una versión cisterna para la lucha contra el fuego y en noviembre de 2019 se presentó en Alemania una nueva configuración del C295, que incluye mejoras en cabina, diseño exterior y capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, ISR.