Un año marcado por el impulso a la industria de Defensa

El año 2015 ha estado marcado en el ámbito de Defensa por las diferentes acciones realizadas para impulsar la industria del sector a nivel nacional y en el ámbito internacional. Por un lado, están los pasos dados en la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) para centralizar la gestión de los grandes programas y preservar las capacidades industriales nacionales. Por otro lado, está la apertura de un nuevo ciclo inversor y el inicio de nuevos programas de adquisición de material.

Respecto al primer aspecto, durante este año, se ha continuado el proceso de transformación de la DGAM para configurarse como una agencia única de adquisiciones. En una larga entrevista para la edición del Perfiles IDS dedicada a la DGAM, el director general de Armamento y Material, el teniente general García Montaño, indicó que la nueva estructura y organización de la DGAM permitirá utilizar las sinergias entre sus órganos directivos para mejorar la coordinación, tener un único interlocutor ante la industria y mejorar sustancialmente la integración de las adquisiciones y su planificación con la política industrial de Defensa.

Otro paso importante fue la definición y aprobación, por parte del Ministerio de Defensa, de las Capacidades Industriales Estratégicas del sector, un total de nueve capacidades que España podrá proteger de la competencia exterior por afectar a intereses esenciales de la defensa y la seguridad nacional, una hoja de ruta esencial para la planificación de las empresas del sector.

Respecto al nuevo ciclo inversor, el Ministerio ha hecho efectivo este año lo que anunció a finales de 2014: la puesta en marcha de dos nuevos programas de armamento, la fragata F-110 y el vehículo 8x8. Además, a finales de octubre, el Departamento recibió autorización para adquirir cuatro aeronaves pilotadas por control remoto de gran autonomía y altitud media (RPAS MALE) MQ-9 de la empresa estadounidense General Atomics por un valor de 160 millones de euros.

En este impulso a la industria de Defensa también hay que incluir la elaboración por parte de las secciones de industria de CCOO y UGT-MCA del ‘Informe sobre la situación y las perspectivas en el sector de Defensa y Seguridad’, presentado en febrero en una jornada en la que también participaron parlamentarios, representantes de la Administración y directivos de las principales empresas del sector.

Claroscuros en el espacio aéreo

Este año también se ha caracterizado por los claroscuros en el ámbito aéreo. Por una parte, se ha presentado el helicóptero Tigre español y el Eurofighter del Ejército del Aire ha demostrado sus excelentes capacidades en la operación de Policía Militar de la OTAN en el Báltico. Por otra parte, en el mes de mayo un A400M sufrió un accidente en Sevilla en el que fallecieron cuatro de sus tripulantes y en enero un avión F-16 griego se estrelló en la escuela de perfeccionamiento de pilotos de la OTAN en la base aérea de Los Llanos (Albacete), causando la muerte de diez militares.

Reorganización de las Fuerzas Armadas

En el ámbito militar el hito más importante ha sido la aprobación de la Orden Ministerial 8/2015, de 21 de enero, por la que se desarrolla la organización básica de las Fuerzas Armadas aprobada el pasado mes de octubre por el Real Decreto 872/2014.

Según se explica en la normativa, el objetivo de esta reorganización es simplificar las estructuras existentes, usar los recursos de forma más eficaz y poner en marcha la fuerza conjunta de los tres Ejércitos ante cualquier operación, incluidas las relacionadas con el ciberespacio y el espacio exterior.

En el plano operativo, ha tenido especial relevancia el ejercicio de la OTAN ‘Trident Juncture’, el más importante de la Alianza en los últimos 20 años y en el que España ha sido una de las tres naciones anfitrionas. Las Fuerzas Armadas españolas participaron en la fase Livex del ejercicio, desarrollada entre octubre y noviembre, con 8.000 militares, 116 blindados, 43 aeronaves y 13 buques.

Foto: Nuria Fernández / Infodefensa.com