20/01/2009 (Infodefensa.com) - Tres militares han perdido la vida tras el accidente de dos aviones Mirage F-14 del Ala 14, uno de ellos de doble mando, en Albacete. El siniestro se produjo durante un entrenamiento rutinario. Según el Ministerio de Defensa, tras perderse el contacto por radar con los dos aviones, minutos después se localizaron los restos de los cadáveres de los pilotos y de las dos aeronaves en dos fincas entre las localidades de El Bonillo y Ossa de Montiel (Albacete), separados por una distancia aproximada de unos tres kilómetros.
Los fallecidos son el capitán Jerónimo José Carbonell Rodríguez, piloto de la 56 promoción de la Academia General del Aire, de 29 años de edad, casado y natural de Murcia; el capitán Fernando Negrete Usón, piloto de la 52 promoción de la Academia General del Aire, de 33 años, casado, con dos hijos y natural de Zaragoza; y el teniente Roberto Carlos Álvarez Cubillas, piloto de la 59 promoción de la Academia General del Aire y alumno del curso de pilotos de Mirage F-1, de 29 años, soltero y natural de León. El capitán Carbonell pilotaba uno de los aviones siniestrados, y el capitán Negrete y el teniente Álvarez viajaban en el otro aparato, que era de doble mando.
La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha expresado sus condolencias a los familiares de los pilotos del Ejército del Aire fallecidos. La titular de Defensa viajó a la Base Aérea de Los Llanos (Albacete), sede del Ala 14 a la que pertenecían los pilotos fallecidos, para conocer sobre el terreno las circunstancias del accidente y dar el pésame a las familias. Asimismo, acompañada por el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, José María Barreda; el jefe de Estado Mayor de la Defensa, general José Julio Rodríguez, y el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, general José Jiménez, transmitió el pésame al personal de la Base Aérea de Los Llanos y a los compañeros de los militares fallecidos.
Tras el levantamiento de los cuerpos sin vida de los pilotos por orden del juez, han sido trasladados a Albacete para que los forenses les realicen las correspondientes autopsias. Asimismo, se han desplazado hasta el lugar del accidente miembros de la Comisión Técnica de Investigación de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM) para analizar los restos de los dos aparatos e intentar determinar las causas del siniestro.