El capitán de fragata Manuel Pérez hizo entrega del mando de la barcaza LST-92 Rancagua de la Armada de Chile al capitán de fragata Esteban López en una ceremonia realizada en el muelle 360 de la base naval Talcahuano.
El comandante Pérez concluyó su período de mando al frente de la barcaza LST-92 Rancagua con más de 1.000 tiros ejecutados, 11 varadas efectuadas y más de 13.000 millas naúticas navegadas.
La actividad, que se desarrolló el 19 de enero, fue presidida por el comandante del Comando Anfibio y de Transportes Navales (Comanfitran), capitán de navío Edgardo Acevedo, quien tuvo palabras de agradecimiento y reconocimiento para el comandante saliente.
El comandante Pérez agradeció en la ceremonia a todos quienes han formado parte de su vida y carrera naval, y dedicó también palabras a la dotación de la barcaza por su profesionalismo y compromiso, que permitieron cumplir con creces todas las tareas encomendadas.
LST-92 Rancagua
La LST-92 Rancagua es una de las tres barcazas clase Batral construidas en la década de 1980 bajo licencia francesa por Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar) en la planta industrial Talcahuano. El buque fue lanzado al mar el 26 de septiembre de 1981 y entregada e incorporada oficialmente al servicio el 8 de agosto de 1983.
Esta unidad, junto a su gemela LST-95 Chacabuco, el buque multipropósito LSDH-91 Sargento Aldea y el remolcador ATF-65 Janequeo integran el Comanfitran. Esta fuerza operativa es responsable de efectuar las operaciones anfibias, permitiendo el despliegue rápido de las unidades de Infantería de Marina, medios de asalto anfibio, vehículos y fuerzas militares expedicionarias que el mando estime pertinente transportar además de entregar apoyo a las comunidades aisladas y a la población en caso de desastres naturales.
La barcaza tiene 79,4 metros de eslora, 13,1 metros de manga y 2,5 metros de calado. La barcaza desplaza a plena carga 1.409 toneladas. Puede transportar 350 toneladas de carga seca o vehículos y capacidad para 180 Infantes de Marina. Posee dos motores diésel de 4.000 HP y logra una velocidad máxima de 14 nudos. Tiene una autonomía de 4.500 millas náuticas.
La institución tiene en marcha el proyecto Escotillón IV que permitirá reemplazar a las barcazas Rancagua y Chacabuco, transporte Aquiles y al buque multipropósito Sargento Aldea que se acercan al final de su vida útil. Asmar adjudicó el diseño básico de la nueva generación de buques multipropósito a Vard Marine. La colocación de la quilla de la primera unidad se efectuará tras la botadura del rompehielos Almirante Óscar Viel, prevista para finales del 2022.
Fotos: Armada de Chile