Vehículos de exploración y reconocimiento terrestre para los regimientos de Caballería de Ceuta y Melilla

El Gobierno español ha anunciado una inversión de 72 millones de euros destinada a la adquisición de Vehículos de Exploración y Reconocimiento Terrestre (VERT) para las unidades de Caballería del Ejército de Tierra en Ceuta y Melilla. Esta medida, que aparece bajo el epígrafe Programa Especial de Modernización (PEM): Vehículo exploración y reconocimiento, forma parte del Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, presentado por el presidente Pedro Sánchez el pasado mes de abril, con el objetivo de alcanzar el 2% del PIB en gasto militar, conforme a los compromisos adquiridos con la OTAN y la Unión Europea.

Ceuta y Melilla, enclaves estratégicos en el norte de África, han sido objeto de atención especial en este plan. La adquisición de estos vehículos busca mejorar la capacidad de vigilancia y respuesta rápida en sus perímetros fronterizos, áreas sensibles debido a su proximidad con Marruecos y su papel como frontera sur de la Unión Europea.

En Melilla se enclava el Regimiento de Caballería Alcántara 10 y, en Ceuta, el Regimiento de Caballeria Montesa Número 3. 

Aunque no se especifica ni cantidad ni modelo concreto, los VERT de los que dispone el Ejército de Tierra están basados en el Vamtac de Urovesa y están diseñados para operar en terrenos difíciles y proporcionar información en tiempo real sobre movimientos en la zona. Equipados con sensores avanzados y sistemas de comunicación, estos vehículos permitirán a las unidades desplegadas en las ciudades autónomas actuar con mayor eficacia ante posibles amenazas o incidentes en la frontera.

La compañía suministró una veintena de unidades de esta versión dentro del acuerdo marco con el Ministerio de Defensa en un programa con la colaboración de Navantia Sistemas, responsable de la integración de los equipos de vigilancia. 

Características técnicas de los VERT

Los vehículos de exploración y reconocimiento terrestre incorporan una ametralladora de 12,70 mm. Su tripulación es de cuatro efectivos, incluyendo un jefe de vehículo, un conductor, un operador del Sistema de Exploración y Reconocimiento Terrestre (SERT) y un operador de armamento por control remoto. Pesan unas 10 toneladas -peso máximo en combate-, tienen tracción 4x4 y alcanzan una velocidad máxima de 118 kilómetros por hora. Disponen de capacidad de localizar e identificar personal a pie al menos a 4.050 metros y de localizar e identificar vehículos al menos a 7.050, según el Ejército de Tierra.

Estas características permitirán a las unidades de Caballería en Ceuta y Melilla realizar misiones de reconocimiento y vigilancia con mayor autonomía y precisión, reforzando así la seguridad en estas zonas.

Mejoras en el VERT

Tal y como explicaba Infodefensa.com el pasado año, el Ejército de Tierra planeaba introducir mejoras en el Vehículo de Exploración y Reconocimiento (VERT), durante la segunda fase del programa. Entre las novedades previstas para la nueva versión de esta plataforma destaca la incorporación de drones para incrementar el radio de acción. 

La integración tanto de drones Mini como Micro en el VERT ya aparecía en las últimas actualizaciones del proyecto Fuerza 35 del Ejército de Tierra dentro de las propuestas para aumentar las capacidades de reconocimiento e inteligencia de la caballería. 

En la primera fase, el Ejército de Tierra recibió 17 VERT, operativos en unidades como el Regimiento de Caballería España n° 11 o la Brigada de la Legión. El proyecto estuvo liderado por Navantia Sistemas que efectuó la integración de distintos equipos (cámaras, sensores, sistemas de operación y visualización de las imágenes...) en el Vamtac ST5 de Urovesa, el vehículo elegido para este programa.  

El plan ahora es dotar al VERT 2.0 con dos modelos de vehículos aéreos no tripulados: Mini, para cubrir distancias de hasta 25 km, y Micro, con un alcance menor de entre 3 y 5 km, tal y como recoge el último número del Memorial de Caballería, publicación oficial del Ejército de Tierra.  

El despliegue de estos drones conectados al vehículo permitiría superar las limitaciones de altura que tiene el mástil del VERT equipado con los principales sensores de vigilancia. El Plan Anual de Contratación del Ministerio de Defensa para 2024 (Pacdef) contemplaba una licitación para la Adquisición de un Vehículo de Exploración y Reconocimiento Terrestre segunda fase valorada en casi 160 millones de euros.  

Junto con la incorporación del sistema de vigilancia de drones, el programa contempla también una mejora de las cámaras y sensores en servicio para contar con la última tecnología en este campo. 

Contexto geopolítico y necesidades de defensa

La inversión en estos vehículos se enmarca en un contexto de creciente tensión en el norte de África. Marruecos ha intensificado su estrategia militar, incluyendo el despliegue de batallones especializados en guerra electrónica cerca de Ceuta y Melilla . Además, las relaciones diplomáticas entre España y Marruecos han enfrentado desafíos, como las trabas en la apertura de las aduanas comerciales de las ciudades autónomas .

En respuesta, España ha reforzado su presencia militar en la región mediante operaciones conjuntas de vigilancia y disuasión, que incluye despliegues en Ceuta, Melilla y otras áreas estratégicas . La adquisición de los VERT complementa estas acciones, proporcionando a las fuerzas desplegadas herramientas avanzadas para el cumplimiento de sus misiones.

Plan de modernización y concentración de unidades

Paralelamente, el Ministerio de Defensa inició un plan de concentración de unidades militares en Ceuta y Melilla, con el objetivo de optimizar recursos y mejorar la eficiencia operativa. Este plan incluye la reubicación de unidades en instalaciones más modernas y la cesión de terrenos a las administraciones locales para su desarrollo urbano .

La combinación de la adquisición de nuevos vehículos y la reorganización de las infraestructuras militares refleja el compromiso del Gobierno español con la seguridad y el desarrollo de las ciudades autónomas, asegurando su integración en la estrategia de defensa nacional y europea.