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D-Gun, el dron 'bombardero' gallego que lanza granadas de 120 mm
La guerra de Ucrania ha demostrado que en ocasiones no son necesarias sofisticadas armas para causar un daño importante al enemigo. Un buen ejemplo son los drones bomba artesanos que dejan caer explosivos sobre un objetivo. Dos empresas gallegas, Aerocámaras y Arteixo, han tomado nota de cómo funcionan estas armas improvisadas y han desarrollado un dron ‘bombardero’ en apenas dos meses, equipado con un mecanismo capaz de lanzar granadas de 60, 81 y 120 mm.
El UAV ha sido presentado por primera vez en la feria Sedexpo que esta semana se celebra en Silleda (Pontevedra). Aunque la idea es la misma, sobra decir que el sistema diseñado por estas compañías cuenta con una serie de mejoras sobre todo en la precisión. El dron, bautizado con el nombre de D-Gun, cuenta en la parte inferior con un tambor o carrete, donde pueden ir hasta cinco granadas, que gira y deja caer el arma, y un sistema de dirección de tiro con telemetría láser que identifica el objetivo.
Este último mecanismo marca la diferencia. Al presionar el botón de disparar, el dron, que ya tiene las coordenadas del objetivo, automáticamente calcula la altura a la que está y la velocidad del viento y fija la posición para que la granada dé en el blanco, teniendo en cuenta la parábola del proyectil.
El dron puede operar tanto de día como de noche. El sistema incorpora una cámara de navegación y otra cámara de auto apuntado cenital con dos cámaras a su vez, RGB y térmica. El operador en tierra cuenta con un puesto de mando donde se ven las imágenes captadas y el objetivo. El control también es posible desde una consola portátil.
Granadas de 60, 81 y 120 mm
Las pruebas efectuadas hasta ahora muestran que a unos 300 metros de altura la desviación media del objetivo es de entre tres y cinco metros dependiendo del viento. Se trata del primer dron industrial gallego, no tiene piezas de aeromodelismo, de uso militar con la certificación Pecal.
El dron alcanza los 55 km/h, tiene una capacidad de carga de hasta 47 kg y puede lanzar granadas de 60, 81 y 120 mm. Las empresas han diseñado un carrete de 120 mm para cinco granadas adaptado para lanzar también los otros dos modelos. Además tiene otro carrete para tres granadas de 60 mm, la versión presentada en la feria.
Toda la integración de la electrónica corre a cargo de Arteixo, mientras que el diseño del dron y el mecanismo de disparo basado en el tambor es de Aerocámaras. La autonomía es de 17 minutos a plena carga con las granadas de 120 mm y aumenta a 27 minutos con la configuración de granadas de 60 mm.
Las compañías ya han efectuado más de 300 pruebas de lanzamiento con granadas dummy, modelos impresos en 3D con el peso aproximado de las reales. El siguiente paso es presentar este desarrollo al Ministerio de Defensa. La previsión es que en las próximas semanas unidades de las Fuerzas Armadas conozcan este dron.
