La Princesa Leonor participará en un ejercicio naval con fuego real a bordo de la fragata Blas de Lezo

El buque escuela Juan Sebastián de Elcano se encuentra en Nueva York en la que será la última escala para la Princesa Leonor, que regresará a España en avión para completar su formación militar con una formación operativa a bordo de la fragata Blas de Lezo, una de las más modernas de la flota española.

A bordo de este buque de la Armada, en el que embarcará la próxima semana en Las Palmas de Gran Canaria tras la celebración de los actos del Día de las Fuerzas Armadas, tiene previsto participar en el ejercicio Sinkex para después integrarse en el Grupo de Combate Expedicionario (GCE) Dédalo, liderado por el LHD Juan Carlos I.

En el transcurso del ejercicio, en el que participará por primera vez el submarino S-81 Isaac Peral, se utilizará fuego real con el lanzamiento de misiles y torpedos para destruir una serie de blancos que, como suele ser habitual, serán buques de la Armada dados de baja. 

Los elegidos en esta ocasión, tal y como informó Infodefensa.com, son el remolcador Mahón (dado de baja hace un año, después de más de 40 años en servicio, y sustituido por el Carnota); el buque hidrográfico Antares (que se retiró a principios de este 2025, tras medio siglo activo) y una empujadora. Los tres llevan ya el 'ex' delante del nombre, prefijo que incorporan los buques retirados del servicio. 

Por el momento, la Armada no ha confirmado de forma oficial qué buques efectuarán los disparos, qué tipo de armamento emplearán y a qué blancos apuntarán. 

La fragata Blas de Lezo en la que se embarcará la Princesa Leonor es la tercera unidad de la clase Álvaro de Bazán (F-100) de la Armada. Fue construida por Navantia en Ferrol, botada el 16 de mayo de 2003 y entregada oficialmente el 16 de diciembre de 2004. Lleva el nombre del teniente general Blas de Lezo y Olavarrieta, uno de los más brillantes marinos de la historia naval española, célebre por su heroica defensa de Cartagena de Indias en 1741.

La Blas de Lezo está diseñada principalmente para la guerra antiaérea, pero gracias a su diseño modular y a su completo sistema de combate puede desempeñar un amplio abanico de misiones, como la guerra antisubmarina, guerra de superficie y operaciones de mando y control en agrupaciones navales. Está equipada con el sistema de combate Aegis, que incluye el radar multifunción SPY-1D/F, capaz de detectar y seguir múltiples blancos aéreos y de superficie de forma simultánea. Esta capacidad convierte a la fragata en un elemento estratégico dentro de la flota, especialmente en entornos de amenaza aérea compleja.

La fragata desplaza 5.853 toneladas, tiene una eslora de 146,7 metros, una manga de 18,6 y un calado de 7,4 metros. Su sistema de propulsión es del tipo Codog (Combinado diésel o gas), con dos turbinas de gas General Electric LM-2500 y dos motores diésel Bazán-Caterpillar, lo que le permite alcanzar una velocidad máxima de 28 nudos y una autonomía de 4.500 millas náuticas a 18 nudos.

En cuanto al armamento, la Blas de Lezo dispone de un lanzador vertical MK-41 para misiles SM-2 y ESSM, misiles antibuque Harpoon, un cañón de 127 mm MK 45 MOD 2, dos cañones Oerlikon de 20 mm y dos estaciones remotas de armas. Para la guerra antisubmarina está equipada con cuatro tubos lanzatorpedos de 323 mm para torpedos MK-46. También cuenta con avanzados sistemas de guerra electrónica como el Aldebarán y el Regulus, así como con sistemas de contramedidas como el SRBOC MK 36 MOD 2 y el Nixie.

La fragata cuenta con un helipuerto y un hangar que le permite operar helicópteros medios como el SH-60B Seahawk, ampliando así sus capacidades en guerra antisubmarina, apoyo logístico y evacuaciones médicas.

La dotación está compuesta por 149 personas, entre ellas 18 oficiales, 28 suboficiales y 103 cabos y marineros. A lo largo de su vida operativa, ha participado en múltiples misiones nacionales e internacionales, incluyendo despliegues con la OTAN, misiones en el mar Mediterráneo, el océano Atlántico y el mar Negro. 

Revista naval

Hasta Canarias, la Armada ha desplazado para el Día de las Fuerzas Armadas una decena de buques entre los que destacan el LHD Juan Carlos I, las fragatas Álvaro de Bazán, Blas de Lezo y Santa María, el buque anfibio Castilla, los cazaminas Rayo y Tornado, el buque escuela Intermares o el submarino Isaac Peral. 

A estos hay que sumar unidades presentes en el archipiélago como los buques de acción marítima Rayo y Tornado del Arsenal de Las Palmas, así como otros medios como los cazas Harrier y distintos helicópteros.

Despliegue Grupo Expedicionario Dédalo

El GCE Dédalo es una fuerza altamente especializada que combina buques de guerra, aeronaves y unidades de Infantería de Marina, lo que le permite actuar con rapidez y eficacia en distintos escenarios. 

La Armada inició estos despliegues en el año 2023 y continuaron con ellos en 2024. Este tipo de despliegues y ejercicios permiten demostrar, en distintas áreas geográficas, la capacidad expedicionaria de la Armada, así como la proyección del poder naval sobre tierra con sus medios aéreos de ala fija y/o la fuerza embarcada de Infantería de Marina, que es única en nuestras Fuerzas Armadas.

A través del Grupo Dédalo, España demuestra su capacidad de proyectar estabilidad más allá de nuestras fronteras y de proteger el tráfico marítimo y el uso del espacio aéreo internacional, siempre en estrecha colaboración con las naciones de la Alianza y países aliados amigos.

En el presente 2025, la Armada tiene previstos tres despliegues del Grupo de Combate Expedicionario, uno ya realizado entre los meses de enero y marzo; este de junio que partirá del Atlántico para seguir por aguas del Mediterráneo y un tercero tras el verano.