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Los nuevos pedidos de Eurofighter crearán más 650 empleos anuales en España y aportarán 1.700 millones al PIB
Los nuevos programas de adquisición de aviones de combate Eurofighter de Alemania y España, Quadriga (38 cazas) y Halcón (20 cazas) respectivamente, generarán en la industria española una media de 657 puestos de trabajo anuales, entre directos, indirectos e inducidos, y aportarán al PIB nacional cerca de 1.700 millones de euros.
La cifra de puestos de trabajo alcanza los 26.000 al sumar los empleos anuales entre la fase de producción (2020-2030) y la fase de mantenimiento (2023-2060), de acuerdo con un estudio de la consultora PWC sobre el impacto económico de los dos contratos en España, financiado por Airbus, con el soporte técnico de ITP Aero. El máximo será en 2028 con 751 empleos anuales, al coincidir el periodo de mayor fabricación con los primeros gastos de soporte y mantenimiento de los aviones.
Los programas también tendrán efecto en el PIB español. La fabricación y mantenimiento de los cazas de Halcón generará unos 1.500 millones, mientras que la producción de los aviones de Quadriga representará otros 200 millones más. En total, alrededor de 1.700 millones que suponen el 68% del PIB directo anual del sector aeroespacial español.
Recaudación fiscal
El estudio, que contempla la producción de la plataforma y el motor (no incluye otros sistema y armamento), señala además que los empleos y la actividad económica permitirán obtener una recaudación fiscal total de alrededor de 430 millones de euros entre IS, IRPF, CCSS e IVA, lo que representa el 22% de la inversión prevista por España en el contrato de Halcón. Por cada euro recaudado directamente, se generarán 2,8 euros de ingresos fiscales totales en la economía española.
Los nuevos contratos beneficiarán principalmente a las industrias aeroespaciales de la Comunidad de Madrid, País Vasco, Castilla-La Mancha y Andalucía. El epicentro será la planta de Airbus en Getafe, donde la compañía fabrica el ala derecha, superficies y borde de ataque de todos los Eurofighter y ensambla los adquiridos por España. ITP Aero, por su parte, ensamblará en su planta de Ajalvir (Madrid) los motores para los cazas del pedido español. En el reparto industrial del motor, esta compañía es responsable de la carcasa trasera, de salida de turbina y de conducto de derivación de la tobera y unidad principal de control de combustible. Junto con Airbus e ITP Aero, participan en este programa otras compañías españolas como Indra, Tecnobit, GMV o CESA.
Durante la presentación del informe, el responsable de Finanzas y Contratos de Aviones Militares de Airbus, Jesús de Miguel, destacó que el programa Eurofighter aporta a España una mayor independencia tecnológica, más autonomía en la decisión de nuevas capacidades y el desarrollo de nuevos programas de ingeniería. Algo en lo que incidió también el responsable del programa Eurofighter en ITP Aero, Luis Marcos. “Estos programas refuerzan la posición del Eurofighter como columna vertebral de la defensa europea”, destacó este último.
Eurofighter más allá de 2060
Alemania firmó en 2020 la compra de un lote de 38 nuevos Eurofighter (programa Quadriga) para la Fuerza Aérea Alemana (Luftwaffe) por 3.740 millones de euros, convirtiéndose en el país con más pedidos de este avión de combate.
España, por su parte, cerró en junio de 2022 el contrato Halcón que incluye la adquisición de 20 aviones Eurofighter de última generación para sustituir a la flota de F-18 que opera en el archipiélago canario por 1.905 millones de euros. Con este pedido, el Ejército del Aire y del Espacio español llegará a los 90 aviones. La entrega de la primera unidad está prevista en 2026. En ambos casos, serán aviones de la conocida como Tranche 4 con una vida útil más allá de 2060, destaca Airbus.
