Marruecos mejorará sus Apache con radares de control de tiro Longbow

La compañía estadounidense Longbow Limited Liability (LBL) dotará a Marruecos de radares de control de tiro (concepto conocido por las siglas en inglés FCR) Longbow APG-78 . Estos sensores mejorarán los 24 helicópteros Apache AH-64E AN que el país norteafricano ha encargado a Boeing en una operación en la que se incluye la opción de otros 12 más. El suministro de estos radares ya ha sido adjudicado a LBL, compañía conjunta de Lockheed Martin y Northrop Grumman, por parte del Ejército de EEUU, que se ocupa de tramitar esta operación de venta militar extranjera. Junto a este contrato se han otorgado otros tres más para dotar igualmente de sistemas Longbow APG-78 para helicópteros Apache a Países Bajos, Emiratos Árabes Unidos y la India.

En palabras del presidente de LBL, Jim. Messina, "el radar Longbow sigue siendo un sistema relevante e importante para las misiones que vuelan las tripulaciones de Apache".

24 helicópteros más 12 en opción

El pasado noviembre la Agencia de Cooperación de Seguridad y Defensa (DSCA, por sus siglas en inglés) anunció la autorización de la venta a Marruecos de 24 helicópteros AH-64E Apache, más otros 12 opcionales, bajo la fórmula de Venta Militar Extranjera (FMS, por sus siglas en inglés). Finalmente, a principios del verano, el Departamento de Defensa de Estados Unidos anunció a principios del verano la adjudicación a Boeing del suministro de estos aparatos, y el fabricante confirmó que el país norteafricano se convierte así en el “decimoséptimo país en adquirir el Boeing AH-64 Apache a través de un contrato para 24 de los helicópteros que se firmó recientemente”.

Con esta adquisición, Marruecos se convierte en el segundo país africano en operar el Apache, tras Egipto, que adquirió su propia flota en 1995. En total, Boeing lleva entregados cerca de 2.500 helicópteros Apache a 16 países, entre los que figuran, además de EEUU, Países Bajos, Grecia, Reino Unido, Japón, India, Singapur, Corea del Sur y Arabia Saudí.

Si no se producen contratiempos, la primera aeronave de este modelo será recibida por Rabat en 2024, y los trabajos de fabricación del último aparato concluirán en marzo de 2025.

El presupuesto militar marroquí se ha incrementado un 18 por ciento en seis años, hasta alcanzar los 34.700 millones de dírhams en 2018 (más de 3.200 millones de euros al cambio actual).