Cantiere Navale Vittoria exhibe en Seafuture sus casi 100 años de historia

La constructora naval italiana Cantiere Navale Vittoria ha llevado su catálogo de productos a la 7ª edición de la exhibición naval Seafuture, que se clausuró el 1 de octubre en La Spezia, al norte de Italia. La compañía, fundada en el año 1927 en Adria (noreste del país) por la familia Duò, se centra actualmente en sus embarcaciones rápidas de patrulla (FPV, por las siglas de este concepto en inglés). Entre ellas figuran las que está construyendo para la Guardia Costera griega, y de las que ya se han finalizado cinco unidades, y las de la clase CB 300 encargadas por la Guardia Costera italiana.

La empresa, en la que trabajan en torno a 300 profesionales, destaca también sus patrulleros gemelos P01 Monte Sperone y P02 Monte Cimone, “los mayores buques jamás construidos para la [italiana] Guardia di Finanza, con sus 58 metros de eslora y 460 toneladas de desplazamiento a plena carga”, de acuerdo con el fabricante. Se trata de unas unidades botadas en 2013 y entregadas en 2015 a las que más adelante se sumará una nueva embarcación, que se va a botar este mismo mes. Al igual que los dos anteriores, la nueva embarcación “será un buque de bajas emisiones y con un impacto medioambiental reducido”, a lo que contribuye su “motor híbrido, con dos generadores eléctricos auxiliares para patrullar a baja velocidad”. Estas naves han sido diseñadas con la colaboración de la empresa neerlandesa Damen a través de una compañía conjunta (joint venture) “que ha dado excelentes resultados en los últimos años”. Este modelo está concebido para realizar con sencillez maniobras rápidas, incluso en espacios reducidos, cambios bruscos de velocidad y paradas de emergencia repentinas.

Otro producto puntero, “que el astillero es capaz de modular según las necesidades del cliente”, es la lancha de desembarco LC 23. Se trata de una solución adquirida por la Marina italiana, para equipar su nueva unidad anfibia polivalente LHD Trieste, que se empleará para apoyar el transporte y del desembarco de personal, vehículos militares y civiles y equipos logísticos.

Lancha de desembarco de recreo

Los responsables de la firma han explicado a Infodefensa.com en su stand de Seafuture el reciente desarrollo de un proyecto a petición de un armador privado “que ha ordenado una lancha de desembarco tipo LC23 con las características de las embarcaciones de lujo para ser utilizada en el desembarco en playas del Caribe”. Este singular encargo es para la compañía “un hermoso experimento, un nuevo concepto, estudiado directamente en colaboración entre el propietario y el departamento técnico del astillero”. Este singular concepto “se adapta a las necesidades de un cliente que también quiere ir rápido, de hecho este barco podrá alcanzar hasta 28 nudos”. La nueva embarcación fue lanzada en junio y se encuentra en la actualidad en fase de pruebas. Este desarrollo traza un puente entre la industria militar y la de recreo que podría marcar la pauta en los próximos años”.

Este proyecto se encuadra en el reto que se ha marcado la familia Duò en el sector de la navegación de recreo, y que en 2020 fue definido con el nacimiento de Vittoria Yachts. Se trata de una marca “dedicada a un tipo de mercado completamente diferente, el de los yates de lujo, el del confort, el de la fiabilidad, el de dar experiencias inolvidables y a medida”.

“Durante un siglo”, explican sus responsables, “Vittoria ha lanzado con éxito retos siempre cambiantes”. Con esta experiencia, añaden, “la extrema atención al detalle y la calidad heredada de décadas de contratos militares y civiles hacen que Vittoria Yachts pueda destacar en el panorama mundial de los yates de lujo, creando embarcaciones innovadoras y únicas”.

800 embarcaciones fabricadas

Cantiere Navale Vittoria, que suma casi un siglo de actividad, “sigue siendo un referente internacional, con una estructura ágil y flexible y una gran profesionalidad y competencia, lo que le permite construir barcos de calidad, a costes contenidos y con unos plazos de entrega indudablemente competitivos”. La constructora naval suma más de 800 embarcaciones fabricadas, entre los que figuran desde buques de carga a barcos de pesca, pasando por petroleros, dragas, transbordadores, barcos de pasajeros y “los muy solicitados buques de búsqueda y salvamento (SAR) insumergibles y autoenderezantes”.

Sus productos se fabrican en una amplia variedad de materiales, incluidas aleaciones ligeras de aluminio aeronáutico, acero al carbono de alta resistencia, acero inoxidable dúplex resistente a agentes químicos, resinas poliméricas o epoxi, y reforzadas con fibras de vidrio, carbono o kevlar.

Sus buques militares y de seguridad, empleados por la policía y los guardacostas, tienen especial predicamento en los países de la cuenca mediterránea. En el sector de la defensa, el astillero cuenta con una amplia experiencia en el diseño y la construcción de patrulleros. En este ámbito se encuentra una unidad botada el pasado mes de febrero para Malta, que ya ha optado por encargar un segundo buque, además de interceptores rápidos y patrulleros en general. Estas naves se suman a los guardacostas que en los últimos años han ordenado Italia, Eslovenia, Croacia, Libia, Malta, Chipre y Túnez han dado órdenes a un centenar de embarcaciones para luchar contra la inmigración ilegal, el contrabando, el narcotráfico, el terrorismo y la protección del medio ambiente y las zonas de pesca.