La industria española de defensa pide certidumbre y planificación a largo plazo ante la cumbre de la OTAN
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La industria española de defensa pide certidumbre y planificación a largo plazo ante la cumbre de la OTAN

Durante una mesa redonda organizada por Infodefensa, "las principales empresas españolas del sector reclaman una estrategia industrial común y estable"
Mesa redonda industria Cumbre de la OTAN
Mesa redonda industria de defensa previa a la Cumbre de la OTAN. Firma: Infodefensa.com
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En un momento decisivo para la seguridad europea y a pocos días de la Cumbre de la OTAN en La Haya, Infodefensa.com ha reunido este viernes a cuatro representantes clave de la industria española de defensa, Indra, Navantia, Airbús y Aicox, en la mesa redonda Industria española ante la Cumbre de la OTAN: retos y oportunidades de futuro.  

El encuentro, incluido en un evento especial con motivo de la Cumbre de la OTAN en el que ha participado también la secretaria de Estado de Defensa Amparo Valcarce, ha puesto de relieve los principales desafíos que afronta el sector en un escenario geopolítico inédito, así como la necesidad de consolidar una estrategia industrial robusta, coordinada y alineada con los objetivos de la Alianza Atlántica.

La mesa, integrada por Francisco Javier Sánchez Segura (presidente de Airbus España), Ricardo Domínguez García-Baquero (presidente de Navantia), Carlos F. Laborda Contreras (CEO de Aicox Soluciones) y Carmen Pérez (directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de Indra Group), ha coincidido en que la industria española dispone de tecnología y talento, pero enfrenta un problema crítico: la falta de volumen y planificación a largo plazo.

“Una oportunidad única para Europa”

"En defensa estamos ante una oportunidad única para Europa y para la OTAN -ha afirmado el presidente de Airbus España-. Pero en muchas tecnologías estamos 30 años por detrás de Estados Unidos. No podemos recuperar tres décadas en cinco años", ha advertido. 

Sánchez Segura ha valorado positivamente la inversión del Ministerio de Defensa en los últimos años y ha subrayado que el 70% de la actividad de Airbus en España se dedica al ámbito de defensa. Ha querido también dejar claro que " Estados Unidos no es el enemigo, es nuestro gran aliado. Pero Europa tiene que decidir qué quiere ser de mayor y apostar por una verdadera autonomía estratégica."

Desde Aicox, su CEO, Carlos F. Laborda, ha insistido en que el sector vive un momento inédito que exige "responsabilidad, realismo y planificación". "No podemos saltar cien metros si vamos caminando de uno en uno", ha ilustrado. Laborda ha remarcado que la homogeneización y la estandarización son condiciones críticas para la eficiencia logística y ha señalado la necesidad de abordar los sobrecostes estructurales que enfrenta la industria europea frente a sus competidores: "Necesitamos proyectos a largo plazo para ser competitivos".

Mayor armonización entre las políticas de defensa europeas

Por su parte, Ricardo Domínguez ha subrayado que "la estabilidad financiera que ahora tenemos es lo que nos había faltado". El presidente de Navantia ha reclamado una mayor armonización entre las políticas industriales y de defensa europeas, tanto en los programas comunes como en los procesos de adquisición. "Desde el punto de diseño y capacidades, hay que uniformar y hacer interoperables todas las marinas de guerra europeas", ha recalcado, aludiendo a la cooperación con Naval Group y Fincantieri en proyectos como el de la futura corbeta europea, un proyecto que, explica, “puede marcar un punto de inflexión”, si bien ha reconocido que "aún están verdes". En todo caso, Domínguez ha incidido en que "la colaboración es estrecha, pero en el mercado internacional competimos a muerte".

También ha advertido sobre la escasez de profesionales cualificados: "Nos faltan ingenieros, ingenieros de datos, matemáticos, informático… Debemos acompañar la apuesta por la defensa con una política de formación adecuada, tanto universitaria como de FP".

La fabricación de munición, un cuello de botella

En esa misma línea, Carmen Pérez ha destacado la importancia de Indra para "impulsar el ecosistema industrial español" como fuerza tractora, incluyendo a pymes, startups y grandes grupos. Ha definido el momento actual como "histórico" y ha defendido que "la industria española tiene una capacidad tecnológica comparable a la de sus homólogas europeas, aunque sean dos o tres veces más grandes". Pérez ha señalado que la guerra de Ucrania ha puesto de manifiesto que la fabricación de munición es uno de los grandes cuellos de botella de la industria y ha pedido a la Unión Europea "agilizar procesos y eliminar trabas burocráticas".

"Las amenazas no solo vienen del Este. La guerra híbrida y la ciberdefensa son ahora mismo riesgos muy reales, y pueden provenir de otras regiones geográficas que afecten directamente a nuestro país", ha advertido.

En cuanto al papel de la industria dentro de la OTAN, los cuatro participantes han coincidido en que se trata de un elemento clave no solo para la defensa de Europa, sino también para su desarrollo industrial. "La OTAN es una alianza defensiva que protege nuestro modo de vida. Colaborar no significa excluir", ha afirmado la portavoz de Indra. "Incluso en la Alianza hay contratos medianos y pequeños a los que pueden optar empresas medianas y pequeñas", ha remachado Laborda.

Sánchez Segura ha puesto en valor que Airbus invierte actualmente 2.200 millones de euros en empresas españolas, de las cuales 700 son pymes, lo que evidencia que "existe un ecosistema inmenso y tecnológicamente muy potente". Sin embargo, ha advertido que "faltan tecnologías que nadie desarrolla" y que el gran obstáculo sigue siendo la falta de volumen: "La cadena de suministro necesita seguridad a medio y largo plazo. Eso solo se logra con volumen y planificación estable".

Sobre la interoperabilidad, Domínguez ha subrayado que la integración en sistemas OTAN actúa como sello de calidad para abrir mercados: "Es una seña de identidad. La industria española aporta mucho a la OTAN". En esa misma línea, Carmen Pérez ha asegurado que "es imposible que un avión sobrevuele el espacio aéreo sin que sea detectado por un radar de Indra".

Los cuatro representantes han coincidido en que la Cumbre de La Haya debe traducirse en una Alianza "reforzada, organizada y con foco claro". "Espero que no haya dudas sobre el compromiso de Estados Unidos ni sobre las capacidades que deben aportar los distintos países", ha afirmado Sánchez Segura. "Más allá de la discusión sobre porcentajes, debemos salir con una unidad fuerte como Europa y como mundo".

"Lo que necesitamos de la OTAN es certidumbre y un plan", ha defendido Laborda. "Que no haya rivalidades internas cuando el foco hay que ponerlo en otro sitio. Cuando discutimos internamente solo mostramos debilidades", ha resumido Domínguez. Y como ha concluido Carmen Pérez, "el reto a futuro es la cooperación, la transversalidad y la convergencia de toda la industria hacia grandes proyectos comunes".

 



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