Después de cinco días de intensa acción en alta mar, la Marina de Brasil (MB) ha finalizado la Operación Aderex SUP-SUB - Lanzamiento de Armas III 2025. En la oportunidad, se ejecutaron más de 40 actividades que incluyeron el uso de armas reales en la zona marítima del estado de Río de Janeiro, entre Ilha Grande y Cabo Frío.
La operación tuvo lugar entre el 14 y el 18 de julio, con el objetivo de elevar el nivel de preparación de los medios navales y aéreos de la f lota brasileña.
Estos programas de entrenamiento de media y alta complejidad buscaban ampliar la capacidad operativa de la Fuerza.
Entre los hechos más destacados se encuentran el uso inédito de Vehículos No Tripulados de Superficie (VSNT) en conjunción con el Buque Aeródromo Multipropósito (NAM) Atlântico; y el empleo de aeronaves pilotadas a distancia en tareas de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (IVR), en favor de la defensa de infraestructuras críticas del Poder Naval y de la retoma de territorios ocupados, mediante operaciones especiales y anfibias con apoyo de fuego naval simulado desde los buques.
La operación también incluyó el lanzamiento de dos torpedos con cabezas de combate contra objetivos submarinos, lanzamientos de misiles y disparos de cañones de 4,5" contra objetivos de superficie, disparos de cañones de 40 mm contra granadas iluminadas y disparos tácticos y de francotiradores por Buzos de Combate.
El uso inédito del VSNT con el NAM Atlântico
Durante Aderex, la Marina de Brasil registró un hito: el uso de un Vehículo de Superficie No Tripulado (VSNT), utilizado de forma inédita desde un buque de la Armada. El equipo operó de forma integrada desde el Centro de Comando y Control del NAM Atlântico.
El evento eleva la capacidad de la Fuerza para operar sistemas no tripulados de forma integrada, lo que refleja directamente el aumento de la capacidad de la Fuerza Naval para operaciones IVR. Para el comandante en jefe de la Flota, vicealmirante Antonio Carlos Cambra, una respuesta rápida y eficaz a determinadas amenazas presupone el empleo del poder naval.
"Se trata de buques, aeronaves, tecnología y esfuerzo militar, incluyendo el despliegue de buzos de combate y una parte importante del Mando de la Fuerza de Infantería de Marina de la Escuadra, como parte del conjugado anfibio, en favor de la defensa del país. También estamos aprovechando las capacidades modernas, como los vehículos no tripulados, todo combinado para aumentar el nivel de formación y preparación de la Escuadra", dijo el comandante.
Otros puntos fueron fundamentales para el resultado satisfactorio de la operación. El primero fue el inicio de la campaña de cualificación de pilotos del 1er Escuadrón de Helicópteros de Ataque (EsqdHA-1) para realizar aterrizajes nocturnos de helicópteros AH-11B - Super Lynx a bordo de buques en el mar, utilizando gafas de visión nocturna. Esto aumenta la seguridad y la eficacia de las operaciones aéreas nocturnas.
El segundo incremento fue el uso de aeronaves pilotadas a distancia integradas en los buques de la escuadra para ampliar las capacidades de la Fuerza Naval.
Para mejorar las operaciones de inteligencia, la aeronave ScanEagle (RQ-1) despegó de la Base Aeronaval de São Pedro da Aldeia (RJ), apoyando a los activos navales mediante la transmisión de información en tiempo real.
Además, seis aeronaves pilotadas a distancia del Batallón de Combate Aéreo de la Flota se desplegaron a bordo del Buque Aeródromo Polivalente Atlântico y del Buque Dique Polivalente Bahía, para tareas como la evaluación de daños resultantes de enfrentamientos reales y el control del movimiento buque-costa de vehículos anfibios.
Cifras
En total, la operación contó con la participación de más de 2.200 militares, el buque Aeródromo Polivalente Atlântico, el Buque Dique Polivalente Bahia, las Fragatas Independência, União, Liberal y Constituição, el Patrullero Macaé y el Buque de Desembarco de Carga General (EDCG) Guarapari, así como seis carros Lagarta Anfíbios (CLAnf), un Vehículo de Superficie No Tripulado (VSNT) y dos Buques de Desembarco de Vehículos y Personal (EDVP).
Aderex SUP/SUB - Lanzamiento de Armas III / 2025 fue reforzado por destacamentos del Grupo de Buceadores de Combate, tropas de Infantería de Marina de la Fuerza de Infantería de Marina de la Flota y siete aeronaves de ala rotatoria y fija, así como siete aeronaves pilotadas a distancia, una del 1er Escuadrón de Aeronaves Pilotadas a Distancia y seis del Batallón de Combate Aéreo.
Integración y oportunidad de empleo de la flota anfibia
Tanto el Bahia como el Atlântico se destacaron como plataformas de proyección de poder, garantizando un despliegue dedicado de más de 220 infantes de marina.
A bordo de los buques, los militares actuaron en movimientos buque-costa por medio de EDCG, EDVP y CLAnf, además de realizar movimientos helitransportados de destacamentos de Fuerzas Especiales y Apoyo de Fuego Naval con Observadores de Tiro Naval, con el objetivo de ampliar la capacidad de proyección de fuerza sobre un entorno simulado conquistado.
La comisión también marcó el retorno del MDN Bahía a la participación en operaciones anfibias. Esto fue posible gracias al transporte del 3º Batallón de Infantería de Marina y de miembros del Batallón de Combate Aéreo de la Fuerza de Infantería de Marina de la Flota.
Las actividades permitieron a los Marines mantener la sinergia con los medios navales a través del llamado Equipo de Combate Anfibio. Esta interoperabilidad consolida la preparación de la Marina de Brasil para actuar en diferentes escenarios operacionales.
Según el vicealmirante Cambra, esta acción revela la esencia de la necesidad de preparación. "Esta es la razón de ser de la Marina, además de ser una oportunidad única para emplear el poder de nuestro Conjugado Anfibio", indicó.